La consejera de Bienestar Social, Juventud y Vivienda del Gobierno de Canarias, Inés Rojas, anunció ayer que en el primer trimestre de este año se podrán empezar a cobrar las primeras prestaciones que prevé la Ley de Dependencia. Sin embargo, también aclaró que los mayores y discapacitados canarios ya cuentan con planes específicos.

Rojas hizo este anuncio en la rueda de prensa en la que informó de la firma el pasado 27 de diciembre del convenio con la Administración Central para la puesta en marcha de la Ley de Dependencia en Canarias, para lo que el Estado aportará siete millones y la Comunidad 26.

La consejera indicó que tras una dura negociación se ha conseguido que se duplique la cantidad que la Administración central tenía previsto destinar a Canarias para la ejecución de la Ley y destacó que la aportación de la Comunidad Autónoma para la puesta en marcha de esta nueva legislación es cuatro veces superior a la aportación estatal, informa Efe.

Indicó que las condiciones geográficas de Canarias no podían permitir una inversión similar a la que se realiza en el resto de España y destacó que el Estado ha sido consciente de esta situación, lo que favorecerá a las Islas en la negociación de los próximos convenios.

Rojas recordó que la ley prioriza la inversión en los servicios, con los que se atenderá a las personas dependientes y al respecto recordó los pasos que ha adelantado Canarias, que ya cuenta con un plan de atención a los mayores y un plan canario para la discapacidad.

Indicó que en la actualidad sólo cuatro comunidades autónomas están pagando la prestación pero sólo con carácter testimonial y subrayó que Canarias ya ha realizado más de 5.200 valoraciones de las que 1.130 corresponden a grandes dependientes.

La directora general de Bienestar Social, Araceli Sánchez, explicó que en Canarias puede haber unas 40.000 personas con alguna dependencia aunque la mayoría de ellas es moderada.