El viaje del salmón será investigado por la Justicia. La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Canarias notificó ayer un auto en el que admite a trámite la denuncia presentada por el periodista Carlos Sosa contra el vicepresidente del Gobierno de Canarias, y sobre la que la Fiscalía Anticorrupción solicitaba también la incoación de diligencias previas. Además, la Sala cita a declarar al denunciante para el próximo miércoles 15 de octubre y remite al Cabildo de Gran Canaria un oficio para que envíe al TSJC el expediente administrativo completo del proyecto de urbanización Anfi Tauro.

Así las cosas, la magistrada Margarita Varona decide aceptar la tesis de Anticorrupción y se investigará si el líder del PP en Canarias cometió los delitos de cohecho y prevaricación de los que se le acusa en la denuncia, después de aceptar la invitación del empresario noruego Björn Lyng (ya fallecido) para realizar un viaje a Austria y Noruega en jet privado dos meses antes de declarar de interés general el proyecto de Anfi Tauro, empresa propiedad del propio Lyng y de Santiago Santana Cazorla.

Según se recoge en la denuncia y como ha informado LA PROVINCIA a lo largo de la presente semana, entre el 22 y el 28 de agosto de 2005, el entonces presidente del Cabildo de Gran Canaria y su esposa, María del Carmen Benítez, aceptaron una invitación de Lyng a pescar salmón al país de origen del empresario, previa escala en Salzburgo (Austria) para presenciar un concierto de música clásica.

Tras el concierto, el matrimonio Soria viajó a Noruega para pescar salmón en compañía de Lyng y de su esposa, para regresar a Gran Canaria el 28 de agosto en un vuelo regular, puesto que, según se recoge en la denuncia, el jet privado se tuvo que quedar en Inglaterra para pasar un reconocimiento técnico.

Dos meses después, el Cabildo de Gran Canaria, presidido por José Manuel Soria, emitió un informe al Parlamento de Canarias en el que consideraba de interés general el proyecto para construir 3.600 camas turísticas, requisito indispensable para conseguir salvar legalmente la moratoria que se encuentra en vigor en Canarias. El pasado año, el Parlamento dio el visto bueno al proyecto, pero con un número de camas muy inferior al solicitado.

La denuncia recoge que Soria aceptó una prebenda (el viaje) y luego agilizó el expediente administrativo mediante el cual el Cabildo insular dio el primer paso para que el proyecto de urbanización de Anfi Tauro pudiera salvar la moratoria turística, y así llevar a cabo el complejo hotelero.