El vicepresidente del Gobierno de Canarias y líder del Partido Popular en las Islas, José Manuel Soria, declaró el pasado miércoles ante el Tribunal Superior de Justicia de Canarias que durante el viaje que realizó en el jet privado del empresario Bjorn Lyng a Austria y Noruega "no se mencionó en ningún momento el proyecto de Anfi Tauro; yo llevaba mi ordenador portátil para trabajar y el señor Lyng pasó mucho tiempo durante el trayecto durmiendo, por lo que no hablamos del asunto", explicó.

A lo largo de dos horas de interrogatorio ante la magistrada Margarita Varona y el fiscal Anticorrupción, Luis del Río, José Manuel Soria dijo cosas como que el empresario Bjorn Lyng (ya fallecido) "nunca me comentó que había presentado el anteproyecto de Anfi Tauro ante el Cabildo", y que vio por primera vez dicho expediente "a raíz de la denuncia", es decir hace sólo tres meses. A una pregunta concreta del fiscal Anticorrupción, que le interrogó sobre el motivo por el que aceptó ir gratis en el jet privado de Lyng a Austria y Noruega, Soria manifestó, sin titubear, que "el señor Lyng era generoso y podía haber hecho lo mismo con cualquier otra persona", a lo que añadió que el empresario "sentía una gran admiración por mi persona como político".

También en referencia al viaje, el líder de los populares canarios declaró que Lyng "viajaba en su avión porque estaba mal de salud, le faltaba un pulmón y un riñón, y por eso le pidió que le acompañara a Noruega porque no le gustaba viajar solo".

CONSEJO DE GOBIERNO. Durante toda la declaración, a la que ha tenido acceso este periódico, Soria se desvinculó por completo de la decisión del Cabildo de Gran Canaria de declarar de interés general el proyecto de Anfi Tauro, hasta tal punto que declaró que "no conocía el orden del día" del Consejo de Gobierno en el que se aprobó el proyecto de Lyng, porque no acudía casi nunca a los Consejos de Gobierno, puesto que "normalmente delegaba en cualquiera de los vicepresidentes". Incluso, Soria declaró que tampoco tenía conocimiento de que el proyecto agotaba el cupo de camas y que, posteriormente durante su tramitación en la comunidad autónoma, supo de lo ocurrido "por los titulares de los periódicos".