El Gobierno canario no planea amortiguar la caída en los ingresos provocada por la crisis aumentando los impuestos que dependen de él. Así lo aseguró ayer el vicepresidente, José Manuel Soria, que exceptuó el impuesto que grava la venta de tabaco, impuesto que sí podría subir, "por razones de salud y medio ambiente".

"No vamos a subir ningún impuesto, y de plantearnos una subida sería una subida relacionada con dos cuestiones; primero la salud y segundo el medio ambiente", comenzó explicando el también consejero de Economía y Hacienda, que puntualizó afirmando: "Estoy hablando de los impuestos sobre el tabaco lógicamente; de haber una subida, sería únicamente sobre este impuesto concreto".

Si el Ejecutivo finalmente se decidiera a tocar el impuesto que grava el consumo del tabaco, el plus de recaudación se dedicaría a medidas medioambientales. "¿Por qué respeto al medio ambiente? Porque si se diera la eventualidad de la subida de ese impuesto, los recursos adicionales deberían utilizarse para la mejora del medio ambiente en Canarias", explicó José Manuel Soria, para concluir: "Por tanto, establecemos una relación directa entre mejora de la salud y mejora también del medio ambiente, pero insisto en que no está planteado que suba".

El vicepresidente canario aseguró no ser "partidario en general de subir impuestos, pero mucho menos partidario de subirlos en época de crisis". A su juicio, "los ciudadanos están ya bastante atosigados con la crisis económica, como para que encima los gobiernos vengan a subir impuestos". Así, Soria entiende que en las actuales condiciones económicas a las que se enfrenta el Archi- piélago, "los gobiernos lo que tienen que hacer no es subir los impuestos, sino ajustar y reducir los gastos, que es lo que vamos a hacer en los pre-supuestos de 2010".