El Gobierno canario costeará durante dos años el alquiler de la vivienda a 2.000 familias con escasos recursos económicos o con ingresos que no excedan de los 10.000 euros anuales como medida paliativa frente a la crisis. El Instituto Canario de la Vivienda subvencionará 300 euros a cada familia y ésta sólo tendrá que pagar 50 euros, aunque también se contempla sufragar la totalidad del alquiler para casos de necesidad.

El Ejecutivo ofrecerá a los promotores la posibilidad de calificar las viviendas como protegidas en régimen especial de alquiler para acogerse a las ayudas existentes y pagará al propietario los 300 euros de la renta. A los dos años se contemplará una opción de compra para las familias arrendatarias a las que se descontará el importe pagado en concepto de alquiler.

Esta es una de las principales novedades del Plan de Vivienda 2009-2012 que el Consejo de Gobierno remitió ayer por vía de urgencia al Consejo Económico y Social (CES). Uno de los principales objetivos de la política de vivienda en los próximos tres años es atender preferentemente a las familias con menos recursos, jóvenes, mayores de 65 años o familias numerosas con dependientes a su cargo y otros colectivos especialmente vulnerables a la crisis económica.

A esta medida de urgencia se suman otras dentro del Plan de Vivienda que ponen el acento en la rehabilitación y reposición de casas y barrios completos en diferentes municipios del Archipiélago y el fomento del alquiler como forma de facilitar la movilidad laboral.

Del plan anterior 2005-2008 se están ejecutando actualmente 11.000 viviendas protegidas en el Archipiélago y, según el Ejecutivo, se han superado las actuaciones previstas en el mismo en un 15%. El nuevo plan llegará a 135.000 familias.