El vicepresidente del Gobierno y presidente del PP de Canarias, José Manuel Soria, explicó ayer en Madrid ante un destacado auditorio empresarial y político las líneas básicas su política económica en el Archipiélago como respuesta la crisis y la antepuso como alternativa a la "errática" del Gobierno central. En los mismos términos se expresó el presidente nacional del partido, Mariano Rajoy, que al presentar a Soria en una conferencia en la capital aseguró que "aquí está el artífice de una política económica que nos gustaría trasladar pronto al Gobierno de España".

Durante una conferencia ante 300 personas en el Fórum Europa, organizado por Nueva Economía, Soria confió en la recuperación de la economía canaria por el repunte en los mercados turísticos tradicionales y pese a la "inacción" del Ejecutivo central, al que acusó de estar preso de "prejuicio ideológicos" por negarse a recortar a tiempo al gasto público y a flexibilizar el mercado de trabajo. "La recuperación internacional podrá ayudar, pero no servirá de nada si no hacemos los deberes", resaltó.

Rajoy, por su parte, ensalzó las medidas del Ejecutivo canario. "En Canarias se está actuando con sentido común y se está haciendo exactamente lo que hay que hacer, mientras que el Gobierno de España está haciendo exactamente lo que no hay que hacer", dijo.

Soria defendió una ambiciosa reforma del mercado laboral, así como una mejora en la aplicación de las políticas activas de empleo en las Comunidades Autónomas. "Esa reforma significa acabar con la dualidad de quienes tiene trabajo y quienes no tienen perspectivas de encontrarlo", apostando por incentivar la negociación dentro de la empresa frente a las negociaciones colectivas.

NO VALEN PARCHES. Aseguró que "esta es una crisis económica profunda y no valen ni los parches ni los cortoplacismo, ni valen acciones de cara a la galería". Tras criticar "los prejuicios ideológicos" del Ejecutivo central "que frenan la recuperación", resaltó que "no es tiempo para las ideologías, es tiempo para las ideas, no es tiempo para los dogmatismos, sino de pragmatismo".

Sobre la situación del pacto de Gobierno, aseguró no ver "ningún signo de ruptura" y recalcó que "sería contraproducente para el partido que tomara ese tipo de iniciativa de ruptura porque si hay algo que valora la ciudadanía canaria es la estabilidad con la que se está gobernando".

Respecto a si preferiría en el futuro ser presidente de Canarias o ministro en un gobierno presidido por Rajoy, el líder de los populares canarios sentenció: "Yo me esforzaré para que en Canarias el PP gane las elecciones y sea la primera fuerza política, pero no obstante ello, siempre estaré donde el presidente nacional me diga que esté".