Los ciudadanos de los ayuntamientos turísticos son los que más pagan con diferencia en impuestos y tasas municipales en Canarias. El último ranking en presión tributaria lo encabeza Mogán, en donde cada residente abona al año 1.046 euros en impuestos y tasas. Les siguen los residentes de Tías (917), San Bartolomé de Tirajana (886), Yaiza (869), Teguise (733) y Arona (701). En el polo opuesto de la fiscalidad local se sitúa Puntagorda y Agaete, cuyos vecinos sólo tienen que desembolsar entre 180 y 200 euros por la contribución urbana, el impuesto del vehículo, la basura o el abasto de agua, entre otras imposiciones.

La lista confeccionada por el Ministerio de Economía y Hacienda con la liquidación provisional de los presupuestos de 2009 coloca en los siguientes puestos, con una carga fiscal por habitante entre 646 y 526 euros, a las corporaciones de Antigua, Granadilla de Abona, Arafo, La Oliva, Puerto de la Cruz, Guía de Isora, Fuencaliente, San Bartolomé de Lanzarote, Haría y Breña Baja.

La práctica totalidad de estos municipios tienen una relación directa con la actividad turística, una característica fiscal que se da en también en el conjunto del Estado español. En este ranking canario, de los 88 municipios que configuran el Archipiélago, 27 han quedado fuera de esta clasificación previa al no haberse presentado las correspondientes obligaciones presupuestarias o estar en trámite. Así, no se registra la presión de fiscal de localidades como Pájara, que ocupa el segundo puesto con los impuestos más altos después de Mogán.

NACIONAL. Sobre la similitud entre el Archipiélago y el resto de España, señalar que de las 29 entidades locales con mayor presión tributaria en España seis eran canarias. Los municipios de San Roque, en Cádiz, y los de Salou y Calafell, en Tarragona, eran los tres primeros ayuntamientos. Mogán ocupaba el quinto puesto. Municipios de la costa andaluza, valenciana y catalana como Calviá, Marbella, Benidorm, Benicasim, Sitges o Lloret de Mar acaparaban los puestos siguientes. La única excepción a esta regla era el municipio madrileño de Alcobendas.

Entre las capitales de islas es Arrecife la que mayor carga fiscal presenta con una aportación de 470 euros por habitante. La segunda es Santa Cruz de Tenerife, con 424 euros, a la que le sigue la capital palmera, con 352 euros, y Las Palmas de Gran Canaria, con 304 euros. La presión fiscal del municipio capitalino grancanario no incluye el incremento en un 30% que ha registrado este año el impuesto de bienes inmuebles (contribución urbana) que tanto ha alarmado a su ciudadanía. En los informes sobre la fiscalidad local se ha reflejado que en el segmento de las localidades grandes o muy grandes los ayuntamientos canarios están entre los que soportan una menor carga fiscal. Por contra, los cuatro más caros son Barcelona, Gerona, Lérida y Tarragona.

Por último, entre los ciudadanos canarios que menos impuestos y tasas municipales pagan, además de los de Puntagorda y Agaete, se encuentran los de Tejeda y Santa Brígida, los tres con alcaldes del PP. Los tejedenses desembolsaron 208 euros por cabeza y los satauteños en una cantidad igual. A continuación se encuentran los residentes de la Vega de San Mateo, de la localidad palmera de Tijarafe y de la Aldea de San Nicolás, con cobros entre los 220 y 230 euros. Se da la circunstancia que los ayuntamientos canarios pequeños tienen una presión fiscal entre las más bajas de las comunidades autónomas españolas. En este apartado son los municipios catalanes los que presentan unas imposiciones más altas, seguidos por los navarros y los vascos.