El gobierno de Marruecos ha comenzado este domingo el desalojo por la fuerza del campamento saharaui de Gdeim Izik. Según informaron fuentes del interior del campamento, cientos de vehículos militares se han concentrado en los alrededores del campamento y han conminado a los saharauis a abandonarlo bajo la amenaza de desalojarlos a la fuerza.

Casi a la misma hora que se iniciaba esa operación, las autoridades marroquíes impidieron la entrada en El Aaiún del eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer y de tres periodistas canarios, entre ellos un enviado especial de LA PROVINCIA/DLP.

El parlamentario europeo y los periodistas no pudieron ni siquiera bajar del avión y sufrieron empujones por parte de policías secretos de Marruecos que subieron a la nave. Finalmente, el comandante del avión de la compañía Binter Canarias les ordenó que abandonaran el aparato porque "se trataba de suelo español".

Los periodistas fueron empujados y zarandeados; no se les permitió ni siquiera bajar la escalerilla del avión sin argumentar razón alguna. Finalmente, el eurodiputado y los tres periodistas canarios regresaron a Gran Canaria tras permanecer una hora retenidos en el aeropuerto de El Aaiún.