González Arroyo no sufrió daño alguno y salió por su propio pie del coche. A primera hora de la mañana, Arroyo se dirigía a una de sus fincas a bordo de un todo terreno marca Toyota Hylux, matricula 4607 CMW.

A la altura de la llamada 'curva de la risa', que se encuentra en la carretera que une La Oliva con La Caldereta, el vehículo patinó sobre el asfalto húmedo y el político majorero perdió el control del coche, volcando en la margen derecha de la calzada y quedando con las ruedas hacia el aire aunque no dio vueltas de campana.

"Me quité el cinturón de seguridad, le di un puñetazo al cristal trasero y salí por mis propios pies", relató ayer González Arroyo a LA PROVINCIA/DLP. Además, añadió que "el suelo estaba muy mojado por la serenada que había caído por la noche. Cuando entré en la curva, a pesar de ir despacio, el coche se deslizó como un papel de lija y volcó fuera de la calzada".

González, que actualmente es primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de La Oliva y presidente del Partido Progresista Majorero (PPM), formación política que fundó tras ser expulsado del PP, se incorporó a sus tareas políticas en el Consistorio con total normalidad ayer mismo.

Una mujer vecina del municipio que llegó a escasos minutos de producirse el accidente afirmó que "cuando llegué ya no había nadie y me asusté porque oía ruido y era la radio del coche que estaba funcionando".

A pesar de la aparatosidad del accidente, Domingo González Arroyo se mostraba ayer exuberante y no paraba de lanzar presagios sobre los futuros comicios de 2011 donde concurrirá por primera vez con su nueva formación: "No sufrí ni un pequeño rasguño y eso es buena señal de que los resultados del PPM van a ser muy buenos porque vamos a estar presentes en todas las instituciones de la isla y, además, gobernando". Arroyo parecía ver en su suerte en la carretera los resultados mismos de la jornada electoral del 22 de mayo.