El 2012 volverá a ser un año de restricciones del gasto público. El escenario presupuestario planteado por la Consejería de Economía y Hacienda para el periodo 2012-2014 recoge para el próximo ejercicio una caída de la inversión pública del 18%, algo menor que la registrada este año, mientras que el descenso de los gastos corrientes no será tan acusado como el ajuste contemplado en las cuentas de 2011. La tímida recuperación de la economía prevista por el Ejecutivo no será suficiente para recuperar aún los niveles de inversión pública de hace tres años, debido a los recortes impuestos por el Estado a la Comunidad Autónoma para retornar a la senda del equilibrio presupuestario.

Los "sacrificios" anunciados por el presidente Rivero en el reciente Debate sobre el estado de la Nacionalidad se traducen en un año 2012 donde las previsiones estiman una caída de las inversiones reales del 22,6% y del 10% en las transferencias de capital. Los gastos financieros de la Comunidad Autónoma descienden un 18% frente al 24,14% del actual ejercicio. La resaca del fuerte ajuste del gasto público iniciado en 2009 se mantendrá el próximo año, mientras en 2013 ya se prevé una recuperación de los capítulos presupuestarios aunque no alcanzarán todavía los niveles anteriores a 2008.

El portavoz del Gobierno, Martín Marrero, recordó ayer que el escenario dibujado por la Consejería de Economía y Hacienda es sólo una "previsión" para presentarla al Gobierno del Estado. Para Marrero, la reducción de la inversión pública es "más contable" que real ya que no desaparecen infraestructuras sino que las inversiones se deslizan en el tiempo. La escasa caída de los gastos de personal se debe a que las retribuciones vienen establecidas por la normativa estatal, según el portavoz.

Este escenario de reducción de la inversión pública en 2012 no gusta nada a los constructores. La presidenta de la patronal de la construcción de Las Palmas, Salud Gil, se quejó ayer de la falta de información de la que hace gala el Gobierno con el sector y de que "la realidad va por un lado y la Administración por otro". En este sentido, los constructores critican que hayan presentado varios planes para dinamizar el sector al Ejecutivo y no hayan obtenido respuesta.

Gil advierte con la adopción de medidas por parte de la patronal que preside en una junta directiva que se celebrará en los próximos días debido a que el discurso del Gobierno en referencia a la construcción es una "escenificación" que no se traduce en hechos concretos. Gil pone el ejemplo de la rehabilitación del sur de Gran Canaria, que "hasta ahora sólo se limita a poner hamacas".

Fondo municipal

En este escenario de ajustes, el Consejo de Gobierno aprobó ayer la distribución del Fondo de Financiación Municipal de 2011, dotado con 202,4 millones de euros a repartir entre los 88 municipios de las Islas. Esta cuantía supone un incremento de casi 4 millones de euros con respecto a 2010, como consecuencia del incremento del IPC del pasado año en un 2%.

Martín Marrero destacó el esfuerzo realizado por el Ejecutivo ya que este es uno de los pocos capítulos presupuestarios que se han librado de los recortes con el fin de mantener al menos los mismos ingresos de los ayuntamientos, instituciones que sí están sujetas a una situación financiera peor que la Comunidad Autónoma. El criterio que prima en la distribución de los 200 millones es el de la población, con un 68%, mientras que los municipios menores de 10.000 habitantes es un criterio que supondrá el 11% del reparto.

Las dificultades por la que atraviesan las arcas municipales ha provocado que sólo unos pocos ayuntamientos cumplan con la totalidad de los índices de saneamiento financiero, mientras que el Ejecutivo ha flexibilizado los criterios debido a la recesión económica.