El Movimiento 15 M exigió ayer la devolución "íntegra" al pueblo de los miles de millones que los gobiernos de varios países occidentales han empleado en rescatar a bancos y cajas que se encontraban en riesgo de quiebra cuando comenzó la crisis económica.

Los indignados se manifestaron ayer por las calles de la capital grancanaria y retan hoy a la Junta Electoral Central al decidir en asamblea mantener su concentración-acampada de protesta en el parque de San Telmo durante todo el sábado -jornada de reflexión- y mañana. "La Junta Electoral dice que a lo mejor nuestra concentración no es legal, y nosotros decimos que a lo mejor la que no es legal es la Junta Electoral", dijo uno de los portavoces del movimiento, ayer.

Antes de la asamblea, a las 18.00, una manifestación de cerca de 3.000 indignados partió de la acampada montada en el céntrico parque para recorrer luego la calle Triana con lemas como "cultura, trabajo y libertad". Antes de partir se advirtió a los concentrados que no se permitirían ningún símbolo político, ni bandera, ni folleto alguno que pidiera el voto para cualquier formación política.

Ya en Triana, formando ruido con cacerolas, tambores y silbatos, los manifestantes hicieron varias paradas en la calle Mayor. Ante diversas sucursales bancarias se corearon lemas como "aquí está la cueva de Alí Babá", y a la altura de una gran pancarta electoral con la foto de tres candidatos los indignados se arrancaron "no hay pan para tanto chorizo".

Al finalizar la concentración, sin incidentes y seguida de cerca por una docena de policías de paisano, se leyó un manifiesto que resumía las razones para indignarse. "Estamos contra el poder bancario, contra la corrupción política, contra la reforma laboral, creemos en un sistema de representación asamblearia y exigimos que se nos convoque en referéndum para votar todas las decisiones que supongan recortes de los derechos de los ciudadanos", dijo Abdul, el elegido para leer el manifiesto en el que en ningún momento se pidió la abstención.