El Grupo Parlamentario Popular ha pedido en el Parlamento la dimisión del presidente, Paulino Rivero, por considerar que los resultados electorales del pasado 20 de noviembre lo han convertido en "un lastre insufrible" para "el futuro desarrollo" de Canarias.

El encargado de pedir a Rivero que "piense en su dimisión, sin prisas pero sin pausas" ha sido el diputado Miguel Cabrera Pérez-Camacho, pues aseguró que el presidente canario "ni sueñe con ser el interlocutor válido" de las Islas en La Moncloa cuando Mariano Rajoy tome posesión.

"El señor Rivero puede encarar su futuro como le de la gana, pero después del 20-N se ha convertido en una losa insufrible, porque ha pedido todo su crédito personal. Apostó por ser el sostén de Zapatero y ha perdido", dijo el diputado.

Pérez-Camacho insistió en que "no sé si volverá al magisterio o hará un estudio sobre el copago o sobre las aguas territoriales canarias", aunque le recomendó que "para que le hagan caso, puede pedir ayuda a la dictadura cubana o ir en helicóptero a Venezuela, aunque allí ya han dicho que le recibirán a gorrazos".

La andanada del diputado conservador fue respondida por el consejero de Economía y Hacienda, Javier González Ortiz, quien aseguró que "está visto que para el PP no ha pasado el período electoral".

COHESIÓN Y ESTABILIDAD

Para Ortiz, tras el 20 de noviembre "no han cambiado los compromisos ni las metas del Pacto de este Gobierno ni las perspectivas de trabajo".

"No ha cambiado el Gobierno, que es el que necesita Canarias y que es cohesionado y estable", insistió Ortiz.

El consejero recordó al PP que "no se han dado cuenta de que este Parlamento lleva meses trabajando", por lo que el presidente Rivero va a seguir timoneando el Gobierno con vistas a "seguir dando pasos para contener el gasto y garantizar los servicios públicos esenciales, para que éstos no sean moneda de cambio, y en poner en marcha los mecanismos para reactivar la economía".