"Los datos de Canarias son alentadores", según expuso ayer el presidente autonómico, Paulino Rivero, al hacer balance del año recién terminado. Según sus estimaciones, el balance de las Islas se cerrará con un crecimiento de su economía cercano al 1%, lo que, entendido dentro del "escenario actual", resulta positivo a juicio de Rivero.

No es el 2% en que los expertos sitúan el umbral para la creación de empleo, pero tampoco es "el 0,5 o 0,6%", en que Rivero fijó el incremento para el conjunto del Estado. La razón principal de este crecimiento superior a la media estatal radica en el buen comportamiento del sector turístico, según expuso el presidente canario.

"Los datos no son muy alentadores para España", expuso Rivero, que definió como "compleja" la actual situación del país. Además, recordó que el ministro de Economía, Luis de Guindos, "ha dicho que la situación pone en riesgo la sostenibilidad de los servicios esenciales".

Paulino Rivero volvió a aludir a la llegada de cerca de 12 millones de visitantes a las Islas durante el pasado año y al volumen de gasto generado por ellos, que se sitúa "cinco puntos por encima del conjunto del Estado", tal y como recordó el presidente.

Estos datos son los que Rivero esgrimió como factor decisivo para que el "desempleo haya crecido un 8% en todo el Estado y en Canarias, la mitad". El reto del Ejecutivo que preside para el presente año es "seguir facilitando la creación de empleo".

En ese contexto, incluyó Rivero los datos obtenidos por el Archipiélago, "una de las cuatro comunidades que han cumplido con los criterios de déficit público", tal y como recordó.

Entre las herramientas que ayudarán a cumplir el objetivo de creación de empleo, el jefe del Ejecutivo canario incluyó los dos proyectos de ley que, según sus estimaciones, animarán la inversión en las Islas: el de armonización de las leyes medioambientales y territoriales y el de sustitución de la ley de medidas urgentes, que caduca en mayo.

En cuanto al primero de ellos, Rivero destacó la necesidad de "facilitar y acortar los trámites", reivindicación en la que durante las últimas semanas han insistido los empresarios, sobre todo de Gran Canaria.

El presidente canario recalcó que el límite para animar a la inversión y con ello conseguir crear empleo estará en "el respeto a las leyes territoriales y medioambientales".

En cuanto a la sustitución de la ley de medidas urgentes, Rivero anunció que incluirá aspectos capaces de lograr que "los empresarios apuesten por la renovación" y la rehabilitación de la planta turística obsoleta.

El presidente destacó, además, la necesidad de reactivar el sector de la construcción por ser el único capaz de absorber mano de obra en gran cantidad. Precisamente esa labor de rehabilitación turística contribuirá a conseguir ese objetivo.

Al respecto del lavado de cara que necesita buena parte de la planta alojativa, Paulino Rivero se mostró esperanzado. Asimismo, ha señalado que espera que el nuevo Gobierno del PP apruebe un "plan renove" para el turismo en Canarias.

"Cambiar viejo por nuevo" se ha convertido en uno de los objetivos estratégicos del Gobierno canario. Es el principal modo con el que pretenden garantizar que el bastión de la economía canaria -"30% del PIB", según Rivero- continúa avanzando. El presidente destacó que existe una serie de destinos emergentes, entre los que citó a Marruecos, Egipto y Turquía, que tienen una planta alojativa muy moderna y amenazan la primacía de las Islas como destino turístico. "Tenemos que mejorar la competitividad", explicó el jefe del Ejecutivo canario.

Volviendo a la construcción, Rivero recalcó que estas obras de remodelación y mejora de los espacios turísticos son la tabla de salvación del sector. El presidente cifró en "un millón" la cantidad de viviendas terminadas sin vender en toda España, lo que hará difícil poner un solo ladrillo más para construir casas.