Los empresarios turísticos se rebelan. La subida de impuestos aprobada por el Gobierno canario tendrá un efecto "tremendamente negativo" para la actividad. El aumento en dos puntos (5% al 7%) en el Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) supondrá unas pérdidas de 100 millones, según los hoteleros. Las patronales anuncian, además, que este gravamen frena en seco las inversiones programadas para la regeneración de la obsoleta planta de hoteles y apartamentos en el Archipiélago.

El presidente de la patronal turística de Las Palmas (FEHT), Fernando Fraile, criticó ayer la decisión del Ejecutivo regional ya que el IGIC en el sector turístico no permite su repercusión "pues nosotros contratamos con un año de antelación y a precios preestablecidos". A su juicio, esta carga impositiva echa por tierra la recuperación de estos dos últimos años ya que con esta medida "estamos perdiendo competitividad a pasos agigantados".

"Vamos a tener nosotros que comernos ese incremento (del IGIC)", señaló desde la patronal tinerfeña Ashotel, su presidente Jorge Marichal, quien criticó que esa decisión se había tomado "con alevosía" ya que imposibilita al sector repercutirla este mismo año. Los hoteleros canarios tienen firmados contratos por valor de 5.000 millones de euros entre las promociones de la temporada de verano 2012 e incluso las que se desarrollan en la próxima campaña invernal 2012/2013.

Verano duro

El presidente de la patronal extrahotelera de Las Palmas, Tom Smulders, mostró su malestar con la improvisación del Ejecutivo de Rivero ya que el sector había cerrado unos precios a la baja ante las señales de un "verano duro" previendo "recuperarnos con los contratos para el invierno, pero con la subida del IGIC tampoco vamos a obtener ganancias este año".

Smulders indicó que la única posibilidad que le resta al sector es la venta por internet, pero esta opción "se va a ver perjudicada por el alza del precio de los billetes de los aviones y una subida en los hoteles por lo que estos clientes se decantará por las fuertes ofertas a la baja que están ya ofreciendo destinos en el Mediterráneo como Turquía".

"Vamos a ser menos competitivos y afectará al número de visitantes", resaltó Marichal, quien añadió que esto nos obligará "a parar todas las inversiones proyectadas".

Además de la subida del IGIC, el Gobierno regional aprobó un incremento del impuesto sobre el crudo y reactivó el impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. El ejecutivo autónomo acordó también este sábado un nuevo impuesto sobre depósitos a entidades financieras y creo una figura impositiva sobre grandes superficies comerciales. El objetivo es recaudar 250 millones en seis meses.