El diputado del PP Miguel Cabrera Pérez-Camacho acusó ayer al Gobierno de Canarias de entregarse a una "orgía impositiva", al anunciar un aumento de la presión fiscal y, sin embargo, negarse a "aceptar otras fuentes de riqueza, como las que pueden provenir del petróleo", en relación a las prospecciones autorizadas por el Estado a Repsol en aguas cercanas a Lanzarote y Fuerteventura.
El dirigente conservador protagonizó ayer en el Parlamento regional un nuevo enfrentamiento entre la oposición y el Ejecutivo (CC y PSOE) durante la comparecencia del consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, Javier González Ortiz, quien justificó el alza fiscal para afrontar el recorte de 800 millones de euros impuestos a las Islas en el presupuesto estatal.
González Ortiz recordó las medidas del anteproyecto de Ley de Medidas Administrativas y de Modificación de Normas Tributarias, aprobado por el Consejo de Gobierno el 21 de abril. Planteó la creación de nuevos tributos y tasas, la eliminación y reducción de algunas bonificaciones fiscales y el incremento de los impuestos sobre el combustible y el IGIC. Con ello el Ejecutivo prevé recaudar 250 millones de euros en los próximos seis meses. El resto, 550 millones, se reducirán con la rebaja salarial del 5% a los empleados públicos, la disminución de gasto corriente y demás gastos en las consejerías.
El consejero argumentó que los acuerdos del Gobierno canario han sido "forzados, pero irremediables". Además, acusó al Estado de haber incumplido con los fondos para sostener la sanidad, educación y servicios sociales en el Archipiélago, al disminuir la partida estatal en 453 millones para estos servicios públicos esenciales.
"Bacanal"
El diputado del PP, Miguel Cabrera, indicó que "al Gobierno canario no se le puede dejar solo porque se entrega a la bacanal tributaria, a esta orgía impositiva, negándose, sin embargo, a otras fuentes de riqueza como el petróleo, suprimir la Policía Autonómica o privatizar la Televisión Canaria". El portavoz popular aseguró que el Gobierno de CC y PSOE "infló las previsiones de ingresos" en el presupuesto autonómico para este año para culpar después al Estado de los recortes. Reprochó a los nacionalistas "vivir siempre de las confrontaciones y luchas estériles para vender sus escasos votos a cambio de un plato de lentejas, como hacían los caciques".
En este punto, avisó de que "las bravatas y chulerías" del Gobierno canario contra el central "no han servido ni servirán de nada".
"Las guerras se entablan cuando hay ciertas posibilidades de ganarlas, no cuando no hay ninguna", apostilló el popular. "Después de darnos caña hasta en el carné de identidad y pasar por alto los intereses generales de Canarias, ahora quieren diálogo", agregó en referencia a una intervención anterior del presidente Paulino Rivero.
El PP está dispuesto a "tender la mano", dijo Pérez-Camacho, pero exigió a CC que "no desafíe" al Gobierno estatal. Se refirió, así, a las reiteradas declaraciones del presidente sobre que Mariano Rajoy "gobierna contra" las Islas y que éstas pueden convertirse en "un problema de Estado". "Diálogo siempre, sumisión ninguna, agachar la cabeza nunca", le contestó González Ortiz.
