El presidente del Gobierno regional, Paulino Rivero, manifestó ayer que el Archipiélago "no puede recortar más su presupuesto". Rivero, en un extenso artículo en su blog personal, advirtió de que si el Gobierno central que dirige Mariano Rajoy impone más recortes "los canarios tendremos que cerrar colegios y hospitales". Y alentó a "instituciones, partidos, empresarios y trabajadores de las Islas "a rebelarse" contra lo que considera una política de grave discriminación por parte del Estado. El origen de la dura reacción del mandatario autonómico está en el último techo de deuda y déficit que establece el Consejo de Política Fiscal y Financiera, algo "inaceptable" para Canarias, según su presidente.

Algo que, en la práctica, y según precisa Rivero, obliga al Ejecutivo regional a aplicar un nuevo recorte presupuestario de 120 millones de euros. "No podemos admitir que se nos penalice por ser una comunidad autónoma cumplidora", apuntó, "aún teniendo unos de los niveles de deuda más bajos, se nos fija un techo de deuda inferior al de otras comunidades autónomas que no han hecho los deberes en los últimos años y cuyos números son escandalosos".

Rivero sostiene que las regiones con más obligaciones financieras que cumplir "podrán endeudarse más", mientras que Canarias "no podrá recurrir a ese mecanismo para obtener 120 millones de euros, absolutamente vitales para cuadrar los Presupuestos del próximo año". Para el presidente canario, en términos regionales, "estamos pagando justos por pecadores".

Ahogados

Según los objetivos aprobados por Hacienda en el pasado mes de julio, el tope permitido para Canarias se reduce en 161 millones, y obliga al Archipiélago a ajustar más para cumplir con el déficit. Rivero afirma que "el Gobierno del Estado no nos puede pedir más esfuerzos de los que hemos hecho y seguimos haciendo. Si se nos pide más, de forma injustificada e insolidaria, el Gobierno del PP condenaría a los canarios a cerrar colegios y hospitales." En su tesis, "si nos siguen ahogando, van a condenarnos a medidas que no hemos tomado ni queremos tomar. Suya será la responsabilidad, porque en Canarias estamos cumpliendo y haciendo bien las cosas".

Rivero adelanta que "defenderemos con uñas y dientes nuestro derecho a que se corrijan las desigualdades, y el tratamiento injusto que estamos recibiendo los canarios por parte del Estado. Cometen un grave error. El PP está alejando a Canarias de España, un error que están tardando en corregir".

En este escenario, el presidente de Canarias manifiesta que trabajará para construir "una mayoría social", para que "alce la voz contra los desmanes de un Gobierno que no está haciendo bien las cosas".

Porque Rivero afirma, tajante, que "Canarias debe rebelarse contra esta grave discriminación. Los canarios", añade, "no podemos permitir que se nos trate como ciudadanos de segunda clase, cuando, por lo demás, hemos demostrado seriedad, rigor y compromiso con la austeridad".

El mandatario regional indicó que las decisiones que está adoptando el Ejecutivo central del Partico Popular, "de manera unilateral y arbitraria, atacan directamente a los servicios básicos que presta nuestra Comunidad Autónoma", que, a este paso en la exposición del dirigente autonómico ". Y "nos va a retrotraer 30 años", y que " arrastrará a la marginalidad a un gran número de familias".

Rivero asegura que, en este contexto, "no podemos quedarnos de brazos cruzados. No nos estamos cruzando de brazos. Como presidente del Gobierno", apuntó, "estoy dispuesto a buscar el mayor consenso social en Canarias en contra de esta política errática del Estado".

También recordó que "ya he tenido contactos con otras comunidades" para establecer un frente común contra el Estado. Aunque no siempre con éxito como revela un titular de La Verdad de Murcia tras el encuentro de Rivero con el presidente popular Ramón Luis Valcárcel: "Le expliqué a Rivero cómo estaba Murcia; y hasta luego Lucas".