Los nuevos ajustes presupuestarios que se prevén para 2013 han acelerado la reestructuración planificada por Sanidad en los hospitales y servicios para reducir gastos y optimizar recursos. La revisión de la cartera de prestaciones del Servicio Canario de Salud, la revisión del libre acceso a las urgencias, un mayor control del derecho a la atención sanitaria gratuita y el límite al acceso a ciertos servicios a los no residentes son algunas de las medidas que refleja el Plan de Reequilibrio presentado por el Gobierno de Canarias al Ministerio de Hacienda.

El Plan de Reequilibrio 2012-2014 presentado para reducir el déficit público contempla medidas en Sanidad como la eliminación de las jefaturas de guardia, la disminución del 10 % del valor de la hora de la guardia, un mayor control en la productividad de los empleados y una reducción de las sustituciones y de las interinidades.

Esta reorganización del Servicio Canario de Salud (SCS) ha disparado las alarmas en los trabajadores y sindicatos, que temen nuevos ajustes y recortes en personal, más cierres de camas y reducción de servicios. Sanidad ya ha disminuido este año en 76 millones de euros los gastos de personal, lo que ha supuesto que unos 1.500 eventuales e interinos no hayan sido contratados o se hayan quedado sin trabajo al finalizar su contrato. Además, Intersindical Canaria (IC) ha protestado ya que Sanidad continúa reduciendo el gasto del capítulo I (personal) de los hospitales para pagar la deuda farmacéutica, factura que asfixia a las arcas de la Comunidad Autónoma.

La reestructuración de servicios y plantas de los hospitales es una constatación diaria para los trabajadores. Sanidad argumenta que se trata de una reorganización necesaria para optimizar los recursos pero el hecho es que en hospitales como el Doctor Negrín, Materno-Infantil y Universitario se han eliminado camas, se han cerrado plantas o se están reubicando servicios. En la mayoría de los casos estas medidas conllevan reducciones de plantilla, con menos trabajadores por cada turno.

Los recortes han provocado una orden taxativa a las gerencias de los hospitales: reducir al máximo el personal eventual contratado para cubrir las vacaciones estivales del personal fijo. Esta situación obliga a los trabajadores de plantilla de algunos servicios a modificar sus vacaciones por la disminución del personal eventual.

Más allá del gasto estricto en sueldos y complementos retributivos, Sanidad aplicará de forma paulatina otra serie de medidas que se irán desarrollando en los próximos meses y en 2013 ante la evidencia de que en los presupuestos del próximo año habrá nuevos ajustes.

Según los sindicatos, sólo entre enero y junio de este año ya son más de 1.500 los trabajadores de los que se ha prescindido en la Sanidad canaria, cifra que aumentará cuando se haga balance del personal que se ha dejado de contratar durante el verano para cubrir vacaciones, bajas y reforzar los servicios más afectados por las listas de espera. A esta situación hay que añadir otros factores como la eliminación de la paga extra de Navidad, el aumento de la jornada laboral y la pérdida de hasta 17 días libres por las medidas aprobadas por el Gobierno central.

Intersindical Canaria denuncia en la página web de la Federación de Salud que Sanidad ha seguido detrayendo fondos de los gastos de personal en los grandes hospitales de las Islas, con la batería de medidas que viene adoptando en los últimos meses, y que la Consejería está destinando este dinero a pagar la deuda que aún mantiene el Ejecutivo con las oficinas de farmacia, que hace poco recibieron los fondos del mes de mayo y que están pendientes de cobrar los gastos farmacéuticos de los meses de junio y julio.