El Ejecutivo canario reduce su parque móvil en 169 vehículos para ahorrar alrededor de 390.000 euros al año. Con este recorte del 22%, los vehículos de la Comunidad suman 595 automóviles repartidos por todo el Archipiélago. Se destinan, en el 90% de los casos, a servicios públicos como es el de emergencias o las inspecciones en diferentes áreas.

Las consejerías que disponen de más medios de transporte son: Agricultura, con 148 coches; Educación y Sostenibilidad, con 112; y Economía y Hacienda, con 92.

La reducción de la flota de la que dispone el Gobierno regional comenzó en marzo pasado con la supresión de los primeros 105 coches. La segunda fase de esta actuación supone eliminar 64 vehículos más en lo que queda de año para llegar a un total de 169.

El criterio que sigue la Dirección General de Patrimonio, dirigida por Abel Morales, para tomar esta medida se basa en la rescisión de contratos de alquiler y en la eliminación de vehículos muy antiguos y en desuso. El ahorro estimado procede de los gastos en la póliza de seguro, el impuesto de circulación, el combustible y el mantenimiento de cada coche.

A la reducción del parque móvil se suma la centralización del transporte en los edificios de usos múltiples de Gran Canaria y Tenerife para el traslado de altos cargos, empleados públicos -que requieran la utilización de vehículos para el desarrollo de sus funciones administrativas- y para el servicio de valija interna. La medida se une al coche compartido implantado hace más de un año para el transporte desde los aeropuertos a los principales centros de trabajo.