Campechano y cercano. Así definen los antiguos dirigentes y militantes majoreros de la Unión del Centro Democrático (UCD ) y el Centro Democrático y Social (CDS) la figura de Adolfo Suárez que visitó la isla de Fuerteventura en varias ocasiones, no solo en visita oficial sino también en campañas electorales.

La muerte del primer presidente de la Democracia ha sido muy sentida en la isla majorera, como en el resto del territorio nacional, no en vano durante sus estancias en Fuerteventura dejó huella. Tras concluir sus compromisos oficiales o políticos en territorio majorero tenía una obsesión por desplazarse hasta El Cotillo o Ajuy, dos enclaves pesqueros donde le gustaba saborear las delicias que el mar ofrece, especialmente el caldo de pescado de Mariquita Hierro o los filetes de vieja empanados.

Uno de los primeros militantes de la extinta UCD fue Cirilo González e Hilario Estévez. González recuerda su asistencia a los primeros congresos celebrados en Madrid y Mallorca " ha sido una de mis grandes experiencias en política, ya que estaba empezando y estar en aquellos salones abarrotados me impresionó".

La cercanía del expresidente, Adolfo Suárez, con la gente y especialmente con los más necesitados se pudo comprobar en sus visitas a la Maxorata. "Rompía todos los protocolos, siempre se mostró cercano a la gente, a los más necesitados. En una ocasión se desplazó hasta el pueblo de Tindaya y se le acercó una señora mayor que le dijo que no cobraba pensión y que lo estaba pasando mal. Suárez se comprometió a pagarle por vida una paga de su bolsillo. Y cumplió su promesa durante los años que vivió esa mujer, que creo que no fueron muchos porque estaba enferma", señala un orgulloso Cirilo González .

El exalcalde de La Oliva, Domingo González Arroyo, mantuvo una relación personal con Adolfo Suárez desde su ingreso en la UCD. " Me dio un cargo importante como miembro de la Junta directiva nacional. Era una persona que se dejaba querer. Era muy difícil no llevarse bien con Adolfo", argumentó Arroyo.

El exregidor norteño rememora como Suárez " siempre comía tortillas francesas, era un plato preferido, pero cuando probó el caldo de pescado de Mariquita Hierro en El Cotillo o los filetes de viejas empanada en Ajuy se olvidaba de ellas. Cada vez que venía a la Isla teníamos que llevarlo a comer a esos pueblos".

Arroyo también da a conocer algunas anécdotas del fallecido Adolfo Suárez durante su estancia en la Isla. " Mariquita la de Ajuy, la hermana de Julián el del ´ bar la Jaula de Oro´ tenía problemas porque no atendían bien a su marido que se encontraba enfermo. Todavía no estaban transferidas las competencias de Sanidad. Adolfo hizo los contactos pertinentes y cambió la situación y a pesar del cáncer que padecía le prolongaron la vida". Uno de los momentos que González Arroyo no olvida fue en un mitin en Corralejo: " Félix Estévez era un admirador total de Adolfo Suárez. Teníamos todo preparado en la plaza para celebrar el acto e incluso Félix nos ayudó. Sin embargo, cuando el hombre fue a su casa a cambiarse murió. Adolfo no quiso celebrar el mitin, lo suspendimos y nos pidió que en su nombre le mandáramos una corona de rosas rojas". Adolfo Suárez también visitó la isla para participar en diversos actos de La Legión. Todo un ejemplo.