La evaluación ambiental de las prospecciones petrolíferas en Canarias y en el Mediterráneo es la "papa caliente" que heredará la nueva ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, en lo que a temas "verdes" se refiere.

Estas prospecciones han provocado un fuerte rechazo por parte de oenegés, partidos políticos, y gobiernos locales y autonómicos afectados, desde Canarias a Baleares y la Comunidad Valenciana, a pesar de la promesa de que los informes se resolverán con el "máximo rigor" científico-técnico.

Las principales ONG consultadas por Efeverde no dudan en apuntar que este tema será la "prueba de fuego" a la que se tendrá que enfrentar la sucesora de Miguel Arias Cañete, quien deja el cargo para encabezar la candidatura del PP a las elecciones europeas.

Junto al petróleo, el desafío del agua y el logro de un Pacto Nacional sobre este bien, tan escaso como disputado.

Un pacto que debe cumplir con la directiva marco de la Unión Europea y "proteger realmente la naturaleza", porque ese es el núcleo de la cuestión, según Juan Carlos del Olmo, secretario general en España de WWF.

La nueva titular del departamento se enfrenta a una planificación hidrológica construida con unos acuerdos "endebles" que abrirán de nuevo las guerras territoriales si se destapa la caja de los trasvases, a juicio de Theo Oberhuber, coordinador de proyectos de Ecologistas en Acción.

Tejerina se encontrará con "mucho camino" recorrido y su labor estará muy centrada en intentar rematar con éxito acuerdos o reglamentos de leyes ya aprobadas o en trámite parlamentario.

Así, y entre otros, queda abierto el reglamento de la polémica Ley de Costas, que atraviesa actualmente la fase de información pública, y en materia de agua una negociaciones en curso con la Generalitat de Cataluña sobre el caudal ecológico que debe tener el Ebro.

En cartera están otros temas no menores, como la Ley de Montes, en fase de anteproyecto, o la de Parques Nacionales, que podría abrir Guadarrama al vuelo sin motor y Monfragüe a la navegación, y que tiene que pasar ahora el trámite parlamentario.

El vuelco legislativo que ha dado Cañete a las normas medioambientales ha puesto en "pie de guerra" a los partidos de izquierda y las organizaciones ecologistas que le reprochan la "devaluación y mercantilización" del medio natural y consideran que hay que "desandar el camino".

Esta oposición será la que tenga que afrontar la nueva titular en su trabajo medioambiental, junto a varios recursos ante el Tribunal Constitucional contra la Ley de Costas.

Otros temas polémicos se refieren a la regulación o no del fracking, técnica de extracción del gas del subsuelo, y las evaluaciones medioambientales de las que también están pendientes algunas grandes infraestructuras viarias, informa EFE.