España ha ampliado su soberanía al oeste de Canarias en un porcentaje equivalente al 60% del territorio nacional. La pasada semana una delegación española formada por miembros de la misión permanente ante la ONU y un equipo científico-técnico registraron la ampliación de la plataforma continental al oeste del Archipiélago en casi 300.000 kilómetros cuadrados, lo que supone la mayor ampliación de soberanía del territorio que realiza España.

Con esta petición se pasa de las 200 millas de la zona económica exclusiva a 350 millas, lo que implica que se extiende la soberanía sobre los recursos naturales del suelo y subsuelo marino en un área de 296.000 kilómetros cuadrados. Esta es la tercera ocasión en la que el Gobierno español reclama aumentar los límites de su territorio más allá de las 200 millas, ya que también lo hizo en el Mar Cantábrico y Galicia. Los científicos documentaron esta petición sobre la base de un gran volumen de datos sobre la morfología y naturaleza del fondo marino canario desde la costa hasta los 5.000 metros de profundidad.

Los derechos que adquiere España al ampliar hasta las 350 millas sus aguas territoriales supone acceder a las posibles riquezas de las aguas y el suelo marino de esa amplia zona como derechos de exploración y explotación sobre hidrocarburos, recursos mineros, pesca, etcétera.

Derecho del Mar

La misión española que registró la petición en las Naciones Unidas se acoge a lo establecido en la Convención del Derecho del Mar, firmada por España, que en su artículo 76 permite a un Estado, si presenta la documentación que lo ampare, ampliar su soberanía más allá de las 200 millas. Se trata aún de una petición que supone un prederecho ya que hay un margen de cinco años hasta que la división de Asuntos Oceánicos y de Derecho del Mar ratifique la ampliación requerida. No obstante, en la práctica ya España puede ejercer su soberanía sobre estas aguas, por lo que cualquier actividad que se vaya a realizar en las mismas requieren la autorización del Gobierno español.

Los datos científicos y técnicos para fundamentar la solicitud se han obtenido a lo largo de seis campañas efectuadas a bordo de tres buques oceanográficos españoles -Hespérides, Sarmiento de Gamboa y Miguel Oliver- equipados con la tecnología más avanzada en el campo de la investigación marina, según Efe.

Estos trabajos han supuesto un total de 72.000 kilómetros de navegación, lo que equivale prácticamente a recorrer dos vueltas al mundo.

Los límites de las nuevas aguas bajo soberanía española chocan al norte con la soberanía portuguesa del archipiélago de Madeira y al sur con la de los territorios africanos situados por debajo del Sahara Occidental.