El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, ha dicho este lunes tras la celebración del consejo de gobierno insular, que la "normalidad" de la institución está "garantizada, de momento". "Desde luego, haré todo lo posible para que en estos dos meses que restan todo lo que sea contienda electoral no repercuta en la buena marcha de la institución", ha agregado.

En su opinión, los actuales rectores tienen un "compromiso" con los ciudadanos de Gran Canaria de seguir gobernando el Cabildo y de continuar haciendo "las cosas de la mejor manera posible, como lo hemos hecho hasta ahora". "Todos los acuerdos del consejo de gobierno de este lunes se han aprobado por unanimidad y no tengo que pronunciarme sobre si me apoyan o no los consejeros del Cabildo", ha subrayado el ahora integrante de la coalición Unidos por Gran Canaria, con la que se presentará a la reelección en las próximas elecciones.

Bravo de Laguna entiende que hay "una discrepancia personal" en lo que cada consejero decida para su futuro y el acuerdo en los temas que tramitan, con los que, según ha asegurado, "van a tirar para adelante". "Quiero distinguir entre lo que es la actitud del PP como partido y lo que es el grupo de gobierno del Cabildo. La corporación está funcionando con normalidad y no voy a entrar en polémica con el partido respecto al tema de mi planteamiento porque ya he explicado las razones por las que me he ido del PP", ha referido.

El presidente del Cabildo entiende que mantiene "una obligación de presentar una propuesta alternativa" porque cree que hay "un déficit de partido insular" en Gran Canaria.