El sector tecnológico canario está dispuesto a dar el salto a Estados Unidos y también a ofrecer servicios de calidad a las empresas norteamericanas que utilicen las Islas como puente hacia África. Aunque no es todavía un sector pujante en la economía canaria, las empresas tecnológicas isleñas consolidadas apuestan por diversificar su actividad y por ello mantienen contactos a diferentes niveles para ampliar su mercado tanto hacia el exterior como con la captación de clientes foráneos.
La nueva etapa que atraviesan las relaciones comerciales y económicas de Canarias con EEUU ha propiciado que se estén multiplicando los contactos institucionales y empresariales entre ambos lados del Atlántico, con el fin de que las buenas intenciones se conviertan en hechos. Un ejemplo concreto es el del Cluster Canarias Excelencia Tecnológica, asociación que agrupa a más de 40 empresas del sector de las Islas, que ya está dando los primeros pasos y para ello ha mantenido un encuentro con el consejero de Comercio de la Embajada de Estados Unidos en España, Robert O. Jones Jr.
¿Cómo se puede competir en la cuna de Google y Microsoft? ¿Qué aportaciones se pueden desarrollar en el país donde está Silicon Valley, uno de los principales laboratorios mundiales de nuevos proyectos tecnológicos? El presidente del Cluster, Benito Fernández Arocena, no cree que sea "pretencioso" que las empresas tecnológicas canarias se puedan implantar en Estados Unidos y que también aporten sus conocimientos y soportes a las sociedades norteamericanas que utilicen a Canarias como plataforma de sus negocios hacia el continente africano.
Ofertas
La clave está en elegir bien el producto que se va a ofrecer, que sean iniciativas novedosas e innovadoras que aporten calidad y valor añadido a las numerosas soluciones "muy maduras" que ofertan las empresas tecnológicas estadounidenses, que son muchas y variadas. Ya hay ejemplos de empresas de capital canario instaladas en Miami, caso de AIDA o Singular Factory, pero es sólo el principio ya que hay empresas que están decididas a dar el salto y preparan su expansión en aquel país.
"El mercado norteamericano es muy potente pero también es permeable", asegura Fernández Arocena. EEUU presume de ser un país poco proteccionista pero también hay que conocerlo para que los proyectos tengan futuro ante la fuerte competitividad que existe en el sector de las nuevas tecnologías. Y la reunión con el consejero Robert Jones fue en esa línea, con el fin de conocer de primera mano las demandas y necesidades del sector tecnológico norteamericano.
El consejero comercial de la Embajada de EEUU en España ve que las iniciativas tecnológicas canarias tienen un importante campo de expansión a través de las relaciones crecientes con el país estadounidense. Jones aclaró las dudas que se le trasladaron por parte de la junta directiva del Cluster. Los empresarios solicitan información sobre las diferentes maneras que hay de desembarcar en el país, si es imprescindible establecerse físicamente o qué ofrece el Gobierno norteamericano a los inversores extranjeros. El sector privado estadounidense cuenta con consultoras especializadas que ayudan a las empresas tecnológicas foráneas para integrarlas en el sistema económico y empresarial norteamericano.
Esta iniciativa empresarial complementa los esfuerzos que realiza la Administración para potenciar la innovación y la investigación. Tanto desde la Comunidad Autónoma como desde los cabildos se han organizado varios traslados de empresas tecnológicas canarias a Silicon Valley para ofrecer sus proyectos y aprender de la experiencia de las numerosas empresas y sociedades instaladas allí. De hecho, el Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) cuenta con el programa Puente de Emprendimiento con el objetivo de que las empresas tecnológicas isleñas actualicen y adquieran nuevos conocimientos en marketing y posicionamiento en el mercado, además de potenciar la internacionalización de sus actividades y establecer nuevas relaciones de negocios con otros emprendedores tecnológicos a nivel mundial.
También los cabildos de Gran Canaria y Tenerife han ayudado a sociedades canarias especializadas a salir a Estados Unidos en el ánimo de que amplíen su negocion y se consoliden en el sector.
En su encuentro con el representante diplomático de EEUU también se abordó las posibilidades que ofrece Canarias para las empresas norteamericanas. Fernández Arocena explica que las Islas "tienen una posición interesante cercana a África" y que ya hay experiencias que así lo demuestran. De hecho, hay empresas del Cluster que prestan servicios a la empresa canadiense Kinross para facilitarle el despliegue de su actividad en el continente africano.
Experiencia
"Las empresas canarias les ofrecemos un nivel europeo en la prestación de los servicios, certificado por los fabricantes", añade el presidente del cluster. La experiencia acumulada con el trabajo desarrollado con empresas españolas y europeas que trabajan en los países de África Occidental es una garantía para poder trabajar con sociedades procedentes del otro lado del Atlántico. "Tenemos ingenieros de calidad y un nivel de inglés adecuado", agrega.
La movilidad y la seguridad son dos posibilidades que se ofrecen por parte de las empresas tecnológicas canarias. Benito Fernández advierte que las soluciones que se pueden ofrecer son a través de las startups, juegos o apps para móviles. En el caso de las empresas que se han instalado en Miami, el objetivo es utilizar la ciudad de Florida como una base para su expansión hacia el mercado latinoamericano, similar a la función que podría realizar Canarias para las empresas norteamericanas que se establezcan en las Islas. "Es cuestión de elegir bien el producto y si tiene posibilidades en el mercado", añade el presidente del Cluster.
La apuesta por el mercado estadounidense no es un proyecto a medio o largo plazo o una declaración de intenciones. La asociación que agrupa al sector tecnológico contratará en breve a un especialista en marketing para impulsar el plan de internacionalización con el fin de que las empresas puedan salir al exterior.
Pero Canarias también acumula debilidades en el sector tecnológico después de siete años de crisis y de recortes que han cercenado las posibilidades de la innovación, el desarrollo y la investigación (I+D+i). Antes de la crisis las Islas no estaban precisamente en un lugar destacado de la inversión pública en innovación, pero los ajustes del presupuesto público han empeorado la situación. El presidente del Cluster Canarias Excelencia Tecnológica cree que el sector ha sido uno de los grandes perjudicados de la caída del gasto público. "Esta situación puede ser un peligro porque vamos a pagar las consecuencias en los próximos años, esto no se recupera fácilmente porque no estábamos bien pero ahora estamos fatal", añade Fernández Arocena, para quien falta "mentalidad, apuesta a largo plazo y confianza en lo que podemos hacer".
Los recortes en la inversión pública en I+D+i ha afectado por igual a la educación como a los proyectos de las universidades canarias o a las empresas del sector. De hecho, Canarias es la segunda comunidad que menos invierte en I+D+i, en concreto un 0,5% de su Producto Interior Bruto (PIB). Esta falta de financiación por parte del Gobierno de Canarias afecta especialmente a proyectos de investigación de gran importancia para el futuro de las Islas.
La financiación de proyectos de investigación por parte del Gobierno de Canarias está paralizada desde 2010. Según un estudio elaborado por la Fundación para la Innovación Tecnológica (Cotec), Canarias es una de las comunidades españolas que menos invierte en I+D+i, con un porcentaje que se queda muy lejos del promedio de inversión en investigación en España.
Los recortes del Gobierno estatal, sobre todo durante los primeros años de crisis, tuvieron su efecto en la partida canaria destinada a la investigación, a pesar de que la tendencia en los países europeos era justo la contraria. Mientras en España la inversión en I+D+i caía, en Alemania y Francia no dejaron de incrementar estas partidas, una media del 4,4% y del 2,8% respectivamente. En España se siguió el camino contrario y el recorte fue generalizado en todas las comunidades, entre ellas Canarias, que empeoró su situación.
