Las intervenciones de Fátima Báñez se caracterizan por el aluvión de datos y una importante dosis de autocomplacencia. Si en plena crisis la ministra se mostraba confiada en que se iba a remontar a pesar de la que estaba cayendo, ahora ya estamos en la lanzadera hacia el éxito. Sabedora de que el principal reclamo electoral para su partido es la recuperación del empleo, el discurso de ayer de Báñez estuvo plagado de las buenas noticias que están dando los datos sobre la creación de puestos de trabajo. En su carrusel de cifras, la titular del Ministerio de Empleo y Seguridad Social tiró también del argumentario electoral del PP y advirtió que sólo con "estabilidad política" se puede seguir creando empleo.
En un auditorio donde no había representantes del Gobierno regional, la ministra se jactó de que Canarias es una de las principales comunidades beneficiadas por las políticas reformistas de Rajoy y que las Islas deben sumarse a esta senda para que salga del vagón de cola del paro junto a Andalucía, tierra natal de Fátima Báñez.
Mujer poco dada a polemizar, la dirigente del PP no hizo sangre de los resultados de su partido en Andalucía, al contrario aseguró que Juan Manuel Moreno seguirá al frente del partido pese a los malos resultados electorales, frente a otros dirigentes que no se sabe cuál será su futuro político, en alusión a la presidente andaluza Susana Díaz.
Báñez estuvo rodeada de una amplia representación del PP canario, aunque ayer no estuvo presente el ministro Soria -estuvo el subsecretario Enrique Hernández Bento-, del que la ministra dijo que tiene "mucho predicamento" en el área económica del Gobierno de Rajoy. Por cierto, con la ausencia ya prevista de José Miguel Bravo de Laguna, sus consejeros del grupo de gobierno del Cabildo hicieron piña y se sentaron en la misma mesa. También faltaron los dirigentes sindicales, en Tenerife debatiendo con Paulino Rivero el REF económico.
