El diputado regional del grupo Socialista Iñaki Álvaro Lavandera ha propuesto que en la Comunidad Autónoma se prohíba realizar mutilaciones a animales domésticos por razones estéticas, como ocurre con la práctica de cortar orejas y rabo por motivos supuestamente higiénicos. Lavandera ha registrado con este objetivo una proposición no de ley en la que defiende iniciar un diálogo institucional con las sociedades protectoras de animales, colegios oficiales de veterinarios y demás colectivos interesados para actualizar la Ley canaria de protección de animales, informa el PSC en un comunicado.

Según la propuesta del parlamentario socialista se trata de adaptar la ley "a la creciente concienciación social" sobre el trato que se dispensa a los animales y, en cualquier caso, que se prohíba la posibilidad de practicar mutilaciones a los animales domésticos, excepto las controladas por los veterinarios en caso de necesidad o por exigencia funcional. Según explica, muchos dueños de animales domésticos consideran que cortar la cola y las orejas a sus perros los hace ver más estéticos, mientras que algunos otros argumentan que es mejor para su higiene y protección. Pero la realidad es diferente, pues la práctica de cortar las orejas y la cola a un perro afecta a su interacción social, además de exponerlo al dolor y a eventuales infecciones, indica el diputado socialista. Subraya que, sin embargo, desde el punto de vista veterinario, la apariencia a gusto del dueño no justifica el sufrimiento a varios niveles al que se somete al animal. Asegura que existen múltiples razones para no realizar estas operaciones, ya que no se trata de cortes sino de amputaciones.

Indica que los cortes de uñas o pelo no son actos traumáticos sino parte de la rutina de limpieza y mantenimiento del perro, "pero en la amputación de la cola (caudectomía) y en las orejas se cortan cartílagos, nervios, vasos sanguíneos y otros tejidos además de la piel". Recuerda que la cola es la continuación de la columna vertebral en el perro, y es un elemento importante para mantener su equilibrio. Por otra parte, expone que la cola y las orejas son vitales para la comunicación del perro pues además de la comunicación oral, el perro envía mensajes a otros perros a nivel físico y humoral. La posición de las orejas y el movimiento de la cola transmiten información importante para la sociabilización con otros animales", añade, y subraya que por tanto "no hay fines médicos que lo sustenten, sólo estéticos".

Lavandera explica que a no ser por casos específicos donde la salud de la mascota se vea afectada, como una fractura de cola, la extirpación de un tumor en esas zonas o por lesiones que no puedan permitir la reconstrucción de estas zonas, estas amputaciones están prohibidas en muchos países del mundo. El diputado subraya que las malas operaciones y manejos posoperatorios pueden causar incluso la muerte del perro. Además de la amputación de cola y orejas, algunos dueños de perros acuden a veterinarias solicitando el corte de las cuerdas vocales para los perros que "ladran mucho" y literalmente los dejan mudos, incapaces de ladrar o con un ladrido sordo y afónico. En el caso de los gatos, indica, la amputación de las garras va más allá del corte de uñas, "pues se corta la primera falange de cada dedo, que es la zona donde crecen las uñas y, además de infecciones, los gatos sufren la deformación de las patas".