La consejera de Turismo, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias, María Teresa Lorenzo, anunció la mañana de este miércoles en el Parlamento que se realizará un estudio exhaustivo para conocer la situación real de la residencialización de las zonas turísticas. "Con el objetivo de poder abordar la solución y enfrentarse a este problema es urgente un conocimiento riguroso y exacto de su estado actual, elaborando registros que lo cuantifiquen y cualifiquen, con datos territorializados por núcleos turísticos, que nos permitan conocer su alcance real, estableciendo un diagnóstico que a día de hoy se desconoce en detalle"

"El carácter transversal de este problema y la gran cantidad de intereses y sectores que implica provocan que sólo se pueda abordar una renovación de este alcance desde el consenso, con la implicación de todo el sector turístico, de sus agentes públicos y privados, porque son procesos de mucha complejidad y calado", aseguró la consejera. En este sentido, "todas las administraciones públicas implicadas (ayuntamientos, cabildos y Gobierno) tenemos que cooperar y trabajar codo con codo para buscar una solución que responda al interés general de Canarias. Y para no ponérselo más difícil aún a esas personas, sino al revés, pues deben contar con nuestro apoyo y lo último que necesitan son alarmas innecesarias. Ésta es una realidad con la que este Gobierno se encuentra y hay que abordarla: no podemos ni vamos a darle la espalda", añadió Lorenzo.

La consejera explicó ante la Cámara que "la residencialización en los núcleos turísticos es uno de los temas más difíciles que se pueden plantear en este momento ya que, en definitiva, es como preguntar por el problema de la rehabilitación urbana, acrecentado con la singularidad de la actividad turística, que en Canarias es de vital importancia al suponer su principal actividad económica y de generación de empleo".

Lorenzo recordó que "este problema no se resuelve tan sólo ni principalmente con marcos legales o instrumentos técnicos, sino que tiene un papel protagonista la necesidad de desarrollar la conciencia ciudadana en cuanto al deber de conservación y rehabilitación, además de incentivar un mejor conocimiento de nuestra principal actividad económica y su repercusión sobre el territorio y la convivencia; en definitiva, mejor y mayor información".

Consenso entre las partes

Lorenzo dejó claro que "cualquiera de las soluciones posibles que se establezcan sólo se tomarán tras el irrenunciable proceso de diálogo que se está impulsando desde desde este Gobierno y siempre y cuando se haya alcanzado el consenso de las partes y agentes implicados".

"El diálogo es la clave de este Gobierno y por lo tanto lo será también a la hora de solucionar este problema a través del consenso", recordó la consejera, que añadió: "En este sentido, y teniendo en cuenta lo expuesto, ya hemos empezado a escuchar a todas las partes implicadas y lo seguiremos haciendo".

La hoja de ruta ya se encuentra trazada, según explicó la consejera en la Cámara: "Procederemos a analizar y estudiar con detenimiento cuáles son las posibles soluciones. Se creará un equipo de trabajo entre las consejerías de Política Territorial y Turismo para abordar este asunto, y revisar la normativa si así se decide, pues estamos dispuestos a una modificación que atienda a la realidad existente de aquellas personas que residen allí como su única vivienda y al interés general de Canarias como destino turístico competitivo, sostenible y de calidad". Para ello, las administraciones mantendrán una estrecha colaboración: "Ayuntamientos, cabildos y Gobierno trabajaremos juntos. Nada es inamovible y estamos dispuestos a reflexionar sobre el marco normativo actual y abrir el debate del modelo turístico que queremos para Canarias, escuchando a todas las partes", explicó Lorenzo.

Todo ello, tal y como concluyó la consejera, "sin olvidar un objetivo irrenunciable de esta Consejería, que es trabajar para mantener el liderazgo turístico de Canarias. Se debe avanzar en competitividad y mejorar la posición como destino de calidad, éxito y referencia internacional en un escenario cada vez más complejo y competitivo debido a los cambios en las exigencias y motivaciones del turista del siglo XXI. Debemos ser capaces de conjugar los legítimos derechos de los propietarios sin menoscabo del objetivo irrenunciable por parte de esta Consejería de mejorar la competitividad de nuestra oferta turística".