¿Cuáles son los puntos débiles de la Constitución?
El gran punto débil de la Constitución es el título octavo sobre la organización territorial del Estado y que ha alumbrado el sistema de las autonomías, que está detrás de gran parte de los problemas de España, de la amenaza secesionista y de una gigantesca deuda pública que se puede atribuir a las Comunidades Autónomas.
¿El Estado de las Autonomías es el Estado del despilfarro?
Sí, pensamos que las autonomías son la razón de la ruina de España. El Estado de las Autonomías es el Estado de bienestar de los partidos políticos y de sus amigos y ha permitido generar una gran cantidad de empleo público asociado a la política, no nos referimos tanto a los funcionarios como a las personas que han podido estar viviendo del sector público gracias al amiguismo y al clientelismo.
¿Qué es lo primero que debe reformarse en la Constitución?
Proponemos que la reforma sea por la vía de un Estado unitario, con un único Gobierno, un único Parlamento y un único Tribunal Supremo. Somos partidarios de suprimir el Senado y el Tribunal Constitucional.
¿Cuál sería el encaje de Canarias en su modelo de Estado?
Tiene el mismo encaje que toda España. Canarias ha estado formando parte de España antes que Granada sin necesidad de tener una autonomía especial. Los hechos diferenciales a los que apelan algunas personas en algunas regiones de la Península son absolutamente injustificables, en cambio sí hay un hecho diferencial en Canarias, que tiene que ver con la insularidad y la lejanía que actúa en perjuicio de sus habitantes y eso debemos tenerlo en cuenta.
¿España está al borde de la desintegración?
Sí. Fundamentalmente lo que el Gobierno está haciendo mal es reconocer la hipótesis de la secesión. El Gobierno sólo combate la posibilidad de la secesión diciendo cuáles serían las consecuencias negativas y apela al Tribunal Constitucional o a sus amigos en el ámbito internacional, bien sean Obama, Merkel y Cameron, pero ello no va a impedir la secesión si el Gobierno con los instrumentos que la ley le permite no la impide.
¿Qué instrumentos?
Debe aplicar el artículo 155 de la Constitución y la suspensión de la autonomía en Cataluña. En una democracia quien comete delitos tiene que pagar penalmente y estamos convencidos y, por eso lo hemos llevado ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, que Artur Mas ha cometido delitos de malversación, prevaricación, desobediencia a los tribunales, usurpación de funciones de las juntas electorales y tentativa de sedición con la declaración de independencia que dice tener guardada en el cajón de su despacho. En un país democrático quien hace eso debería estar en prisión y no siendo recibido en el Palacio de La Zarzuela.
¿Qué ocurrirá en las elecciones catalanas de este domingo?
No voy a aventurar el resultado, pero, tanto los separatistas como el Gobierno de la nación, han convertido estas elecciones en un plebiscito. No deberían de haberse celebrado porque son unas elecciones fraudulentas. Es un fraude de ley de libro porque se convocan con el objetivo de declarar la independencia y lo que va a pasar es que los argumentos de los secesionistas, de una manera o de otra, se van a ver reforzados.
¿Pase lo que pase este domingo el Gobierno central debe negociar con la Generalitat?
Entre el desafío a la ley y la ley no hay negociación posible. Hay que aplicar la ley sin ningún tipo de negociación. Eso pasa por la destitución de todo el Gobierno de Cataluña y aplicar la Constitución. La aplicación de la ley, por muy contundente que sea, sería absolutamente reparadora y sanadora.
¿Y la voz de los catalanes en las urnas?
Me parece bien escuchar la voz de los catalanes, los vascos y todos los españoles, pero, sobre todo, me parece bien aplicar la ley. Éstas son unas elecciones autonómicas convocadas fraudulentamente para declarar la independencia. La unidad de España y la unidad de una nación democrática en cualquier legislación ni se vota ni se discute ni se somete a plebiscito, se defiende aplicando las leyes.
¿A qué riesgos se enfrentan los catalanes?
No le puede pasar nada peor a un catalán que dejar de ser español. No voy a advertirles como el Gobierno con la penuria económica ni con la salida de Europa.
¿Qué puede encontrar un ciudadano en Vox que no ve en otros partidos?
Vox quiere representar a la derecha en España. Hoy la derecha no tiene representación. Mariano Rajoy ha contribuido a consolidar la tercera legislatura de Zapatero en todos los terrenos. Rajoy ha dejado de representar a muchos españoles, algunos de ellos todavía le votan teniéndole gran antipatía porque han sucumbido en el voto del miedo, en la estrategia del voto útil que es lo único que en estos momentos tiene el PP para tratar de movilizar a su electorado.
Hay quien dice que Vox es ultraderecha o extrema derecha.
Es normal que se diga eso en España. Es normal que todo lo que se reivindique sin ningún complejo de derecha trate de ser estigmatizado. Pero a nosotros no nos molesta. No perdemos ni un segundo en tratar de justificarnos. Estamos convencidos de que hay millones de españoles que piensan como nosotros y, si defender la unidad de España, el derecho a la vida y que los impuestos deben ser bajos, y criticar las autonomías y al Estado por haber destruido las clases medias, es ser de extrema derecha, pues en España habrá millones de personas de extrema derecha.
