La propuesta del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, de que la juez María Victoria Rosell lidere la candidatura del partido al Congreso por Las Palmas provoca un nuevo motivo de discordia en el seno de la formación morada. El sector crítico, encabezado por Juan Manuel Brito, exige que su nombramiento sea refrendado mediante un proceso de primarias y no dependa en exclusiva de "una decisión personal".

Iglesias confía en que el fichaje de la portavoz de Jueces para la Democracia, avalado por la dirección regional de Podemos, dé un revulsivo a la organización en el Archipiélago. Su designación forma parte de la estrategia de colocar a personas "notables" en los puestos de salida de las listas para atraer a los votantes de cara a las elecciones generales del 20 de diciembre.

Nadie de Podemos en Canarias discute la trayectoria profesional de Rosell y su perfil como juez progresista, pero sí su inclusión directa en la lista a la Cámara Baja por Las Palmas, a la que se sumaría como independiente. La facción crítica exige cumplir el reglamento para la elección de candidatos.

El vicepresidente del Cabildo de Gran Canaria y dirigente de Podemos, Juan Manuel Brito, defendió ayer que Rosell "debería ser elegida en un proceso de consulta o de primarias por parte de los votantes de la circunscripción, como mínimo, de la provincia, o del conjunto de Canarias", como ha ocurrido hasta ahora con todos los aspirantes en las citas electorales. A su juicio, "no sería positivo que los candidatos no fuesen seleccionados por ese proceso en el ámbito de Canarias". "Si algo ha aportado Podemos y si de algo nos sentimos orgullosos, es de nuestro proceso de primarias, en el que cualquier ciudadano se puede presentar y en el que cualquiera puede votar", resaltó.

"Excelente candidata"

Pese a su crítica, Brito admitió que Rosell "sería una excelente candidata". La secretaria general de Podemos en las Islas, Meri Pita, insistió en el "extraordinario perfil" de la juez, al tiempo que rechazó que su nombramiento deba ser sometido a primarias. De hecho, recordó que cuando se llevó a cabo este proceso se aprobó también autorizar a la dirección a establecer contactos con personalidades relevantes, movimientos sociales y otras organizaciones que contribuyan a revalorizar cualquier candidatura.

Por tanto, descartó una nueva convocatoria de primarias y explicó que las bases tendrán que ratificar la entrada de la magistrada en la plancha electoral y el orden en el que quedaría en la lista.

Este episodio ha abierto un nuevo enfrentamiento entre Claro que Podemos, el bando oficial, y la corriente Contigo Podemos, liderada por Brito y sobre quien pesa aún un expediente de la Comisión de Garantías nacional del partido por un caso de nepotismo en el Cabildo y sus ataques a la dirección en las Islas. No obstante, este informe se frenará hasta después de las elecciones, ya que a ninguna de las dos facciones les interesa una guerra en vísperas de los comicios, según fuentes de la organización.

Podemos prevé aprobar definitivamente sus candidaturas a las Cortes antes de final de mes. Entretanto, Rosell medita su salto a la política, tras 18 años de carrera judicial, en los que destaca su lucha contra la corrupción. Aún no ha solicitado al Consejo General del Poder Judicial su excedencia voluntaria. El órgano de gobierno de los jueces precisa que aún Rosell no tiene por qué pedirla ya, sino una vez que sea proclamada candidata. Fuentes del CGPJ niegan que mientras las causas que instruye estén "contaminados" por su hipotética aspiración política. Si bien si una de las partes de los procedimientos quiere impugnarlo "tiene todo su derecho a presentar una causa de recusación", añaden. Entre sus casos abiertos, Rosell investiga al empresario Miguel Ángel Ramírez por un supuesto fraude a Hacienda de 20 millones de euros.