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Patricia Hernández: "Tendremos un plan contra la explotación laboral para que nadie se salte la ley"

"La Dependencia no es solo una cuestión de justicia social, encierra un factor de riqueza, crecimiento y empleo", apunta la vicepresidenta del Gobierno regional

La vicepresidenta del Gobierno y consejera de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda, Patricia Hernández, ayer. CARSTEN W. LAURITSEN

Patricia Hernández (Santa Cruz de Tenerife, 1980). Nada más cumplir la mayoría de edad se afilió al PSOE y aunque en su familia no había tradición de militancia política, en la casa de sus padres, en el barrio de La Salud, siempre se votaba al partido socialista. Con solo 24 años, y sin haber tenido experiencia política en corporaciones locales, aterrizó directamente en Madrid para convertirse en la senadora más joven. La prensa enseguida se fijó en ella y la aupó, en dos ocasiones, como política revelación: primero como senadora y, dos legislaturas más tarde, como diputada. En las redes sociales empezó a sumar miles de seguidores que, muy posiblemente cosechó por los rifirrafes dialécticos que tuvo con dos ministros del Gobierno de Mariano Rajoy que ya no continúan: Alberto Ruiz-Gallardón y José Ignacio Wert. Hoy, con 35 años, es vicepresidenta y consejera de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda, uno de los departamentos más grandes del gabinete que preside Fernando Clavijo.

Ya han transcurrido cien días en el Gobierno de Canarias. ¿Qué valoración hace?

Tenemos una forma de hacer las cosas que es la nuestra. Haciendo las cosas para la gente y contando con la gente. Estamos trabajando rápido para cumplir lo antes posible con los compromisos de gobernabilidad, a pesar de que es difícil, entre otras muchas cuestiones, por la situación económica y presupuestaria. Pero incluso en este contexto estamos buscando fórmulas como la Ley de Crédito Extraordinario para poder ponernos al día en la Prestación Canaria de Inserción (PCI), en la Ley de Dependencia y en el abono de parte de la nómina atrasada de 2012 a los funcionarios. Tengo la sensación de que se ha marcado una línea que no va a volver a cruzarse en la forma de hacer política no solo para la gente, sino con la gente. Y esto es así porque nadie más va a poder, hasta dentro de mucho tiempo, hacer las cosas como se venían haciendo a la vieja usanza.

¿Cómo se encontró la Consejería de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda?

El área de Políticas Sociales, con bastante necesidad. Nos encontramos con una PCI sin dinero y la Dependencia sin ni siquiera saber cómo estaba. Me llevé un disgusto porque nos creímos la información que se nos había dado. En realidad el desfase se había producido en las estadísticas y era una cuestión de transparencia, aunque lo que de verdad nos importa es mejorar la situación de los dependientes y sus cuidadoras. En el área de Vivienda habían algunos temas inexplicables como las Torres de Jinámar, que estaban sin entregar las viviendas y que, de verdad, no puedo dar una respuesta a por qué se había dado esa situación de parálisis. Tendría que ser la consejera anterior (Inés Rojas) la que lo explique. En ese sentido y superado algún desajuste como la luz, se solventó el problema bastante rápido.

¿Cómo marcha el pacto de Gobierno?

Bien porque estamos cumpliendo un acuerdo de gobernabilidad firmado previamente, con un marco tan estable y extenso que sabemos a lo que atenernos con lo que hemos pactado.

¿Qué le diría a quienes insisten en decir que el pacto durará solo hasta las próximas elecciones generales?

Son los mismos que dijeron que el PSOE se iba a meter un batacazo en las elecciones, los mismos que enunciaron que el PSOE no iba a estar en el Gobierno. Son algunos a los que les sale urticaria porque un partido de izquierdas esté en el Gobierno de Canarias. Dicen también que el pacto se va a romper y en realidad lo que expresan es su deseo de que el PSOE no gobierne en Canarias, y de paso en España, pero esto no coincide con el sentir de la ciudadanía. Así lo hemos visto con el batacazo del PP en las pasadas elecciones y lo veremos en el batacazo que se van a llevar en las generales.

¿Mantiene sus aspiraciones a liderar el PSOE en Canarias en el Congreso del próximo año?

La aspiración que tengo por ahora es ganar las elecciones generales y cuando lleguemos a ese río cruzaremos ese puente. Ahora no toca.

¿Qué opinión le merecen las conversaciones que mantienen Nueva Canarias con su partido de cara a una alianza para las elecciones generales del 20-D?

No he estado en esas conversaciones, pero parece que aún se trabaja en un programa de gobierno.

Trabaja en un plan estratégico de lucha contra la pobreza y la inclusión social. ¿Qué avances hay y cuándo lo presentará?

Estamos poniendo en marcha más acciones inmediatas de las que tenía el anterior gobierno de Rivero en materia de lucha contra la pobreza. Al Plan de Empleo Social o los comedores escolares, se suma el Plan de choque de la Dependencia, el incremento de fondos para la PCI, las acciones en materia antidesahucio, las viviendas sociales y se incorporarán acciones al plan anterior. Dicho esto, nos parece que debemos hacer un plan a largo plazo. Lo inmediato no nos puede paralizar lo importante, como son los cambios estructurales. En épocas de bonanza económica en Canarias se repartía muy mal la riqueza, se creaban puestos de trabajo precarios y los sueldos eran muy bajos. No hay una estrategia aún sobre cómo afecta vivir en el medio rural o urbano para ser más o menos pobre, o cómo afecta la enfermedad en el empobrecimiento de los ciudadanos, a quienes sufren la enfermedad crónica o sus familiares; si se vive en una de las dos islas capitalinas o en las otras; por qué la pobreza tiene nombre de mujer en Canarias, por qué cobran menos que sus compañeros cuando hay muchas más mujeres con más formación o titulación superior. Todo esto queremos estudiarlo en una acción o estrategia global, aunque esto no nos aparta de las medidas que incrementamos sobre el plan de urgencia. Pero Canarias debe contar con un diagnóstico de los motivos por los que se redistribuye tan mal la riqueza en momentos de bonanza y cómo afecta también con la crisis.

En este sentido usted ha dicho que "se va a notar la diferencia con la estrategia anterior" y que pondrá sobre la mesa "euros contantes y sonantes, no espejismos".

Para las propuestas inminentes los veremos y no será un ajuste contable, sino que se van a incrementar determinadas partidas. ¿Cuánto? Pues fíjese que Canarias va a tener más recursos en un presupuesto mayor para el próximo año, con más ingresos, y sin embargo, el señor Montoro no va a dejarnos gastar más por la regla de gasto. El ministro ha decidido que ese dinero de más tiene que dedicarse a pagar la deuda de antes, y no es que no la estuviéramos pagando porque Canarias es una comunidad cumplidora con su deuda. Lo que ocurre es que el señor Montoro ha decidido que las necesidades de los ciudadanos no son importantes y van después de la disposición de un dinero que hay que ahorrar.

Con el techo de gasto fijado para las comunidades autónomas, y puestos en el mejor escenario posible en el que lleguen más fondos ¿Podrían dedicarse a incrementar partidas para la PCI, Dependencia u otras políticas sociales que se consideren gastos? ¿Qué margen de maniobra hay?

La prioridad para el Consejo de Gobierno son las personas y por lo tanto las partidas que crecerán son las de la PCI y la Dependencia. La Educación y la Sanidad también son fundamentales, y la prioridad es que los gastos vayan a estas cuestiones. Pero no es una cuestión solo de ingresos, es que repito que desde el Gobierno de España no se nos deja poner el dinero donde los ciudadanos lo necesitan. Es dramático y un escándalo, y tengo muchas ganas de que sean desalojados de La Moncloa y como yo, todas las personas con las que hablo, porque nadie entiende que se obligue a las comunidades a no poner el dinero donde más lo necesita la gente.

Para dotar de fondos a la PCI y la Dependencia se ha tenido que recurrir a una ley de crédito extraordinario. ¿Serán suficientes los fondos porque hay voces que dicen que serán insuficientes?

Con los datos de nuestros técnicos solicitamos un crédito extraordinario de 7,5 millones de euros para la PCI, para pagar lo que se debe y atender a los nuevos solicitantes hasta final de año. Quienes dicen que los fondos serán insuficientes tendrán menos información que los técnicos de la Consejería. Soy bastante escrupulosa y me fío de quienes tienen todos los datos. Es la información que he trasladado al Consejo de Gobierno y es en lo que nos hemos comprometido.

¿Cómo va a solucionar el tiempo de espera que padecen los solicitantes de una PCI o quienes reclaman su derecho por la ley de Dependencia o simplemente que alguien las visite para evaluar su situación y obtener el Plan Individual de Atención (PIA)?

Por un lado está la PCI, que primero pasa por los ayuntamientos, que es a donde se dirigen los ciudadanos como primera administración. Estamos dispuestos a acortar los plazos que se tardan entre las administraciones, pero es cierto que donde más problemas hay es en los ayuntamientos aunque no podemos echarles todas las culpas porque la verdad es que las corporaciones locales están asfixiadas. En segundo lugar hay que tener disponibilidad presupuestaria y es lo que hemos pretendido desde primera instancia, que la PCI cuente con todos los fondos necesarios. En cuanto a la Dependencia necesitamos más trabajadores públicos, más personal. Estamos diseñando un plan de choque y uno de los puntos es el aumento de la plantilla. Es fundamental que el PIA se tramite lo más diligentemente posible porque de las 12.000 personas que esperan por un PIA hay muchas que llevan varios años esperando y esto no puede ser porque es un derecho reconocido por ley.

Tiene pensado hacer algo con la figura del cuidador, después de que el Gobierno de Mariano Rajoy extinguiera sus cotizaciones?

Estoy segura de que el Partido Popular, que ha maltratado a la Ley de Dependencia, que la ha llevado a cero, perderá las elecciones. Confío que entonces contaremos con la complicidad del Gobierno de España. El problema en Canarias es que cuando el Gobierno de España estaba desarrollando la Ley de Dependencia aquí no se creía en ella, y luego cuando en el Gobierno de España hemos tenido a alguien que no ha creído en ella, no hemos tenido recursos. Así que confío en que se abra un nuevo ciclo tras las elecciones generales. El asunto de los cuidadores o cuidadoras no es solo una cuestión de justicia social, sino que además es dinamizadora de la economía porque son miles de puestos de trabajo que se podrían activar. La Dependencia es también un factor que genera crecimiento, empleo y riqueza.

¿Hay déficit de plazas en centros de día, de día y noche o personal para atender a las personas dependientes? ¿Cuántos medios más serían necesarios para cubrir las necesidades?

El problema de la Dependencia es que hay mucha gente que no tiene el PIA, que es lo que les da derecho a acceder al sistema y a los recursos. Preguntaba por las residencias, pero también está la prestación por servicios, las cuidadoras (...) El problema fundamental es que hay un bloqueo anterior.

Con los PGE para 2016 que están en tramitación en las Cortes pero que ya la CE ha puesto reparos ¿Confía en que habrán más fondos para Canarias o dada la desviación de 10.000 millones usted augura nuevos recortes?

Los señores del Gobierno de España, que decían que eran buenos gestores, han demostrado que son pésimos también aquí. No solo llegaron al Gobierno para repartir dolor sino que después de que ya no les cree nadie, ahora les reprochan desde Europa las cuentas que presentan, sus datos de déficit y de deuda. Hemos multiplicado la deuda como nunca en España, y esa es su responsabilidad añadiendo que además lo han hecho eliminando la Ley de Dependencia o que solo cuatro de cada diez parados cobra prestación por desempleo que, por cierto, la redujeron. Han recortado en Sanidad, en Asuntos Sociales, en becas y ayudas para libros (...) Han hecho tal destrozo, tal daño a la gente y no solo a quienes están desempleados, sino a quienes tienen trabajo, que es inexplicable. Y encima en economía lo han hecho todavía peor, porque han multiplicado el déficit y solo resisten el déficit porque a quienes mandan a recortar y ahogan es a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos, siendo las primeras, además, donde descansa el estado de bienestar. Es un escándalo y si han hecho unos presupuestos pensando en las elecciones no engañan a nadie porque votan los mayores de 18 años, que han sufrido todas sus medidas.

La mejor política social es el empleo. ¿Qué políticas ha puesto en marcha ya y qué planes tiene sobre la mesa para la creación de empleo en las Islas?

Pero no cualquier empleo, porque hay un mantra que mantiene que es mejor tener un trabajo por 300 euros que no cobrar nada. Y esto es intolerable. Debemos generar empleo y un empleo no es igual a un puesto de trabajo. Hay que generar empleos de calidad que den para vivir y acabar con la figura de los trabajadores pobres, de quienes trabajan y no llegan a final de mes. Los datos son cada vez más alarmantes. Tenemos dos vertientes: por un lado la generación de empleo donde las empresas son las que lo crean y por ello tenemos que generar las condiciones propicias para que puedan crearlo, pero también tenemos que aumentar la empleabilidad de los desempleados como es la formación o el reciclaje de quienes ya no van a poder trabajar en el mismo sector en el que antes lo hacían. Y no es un problema que solo afecte a un determinado grupo de población. Hay parados de larga duración, mayores de 55 años, de más de 45 años, jóvenes sin formación que precisan cualificarse, quienes necesitan una primera oportunidad de trabajo porque están hiperformados y ahora solo esperan a coger el siguiente avión para marcharse fuera. Son acciones concretas para aumentar la empleabilidad, sea en experiencia laboral o más formación. Pero, por otro lado, tenemos que impulsar el plan contra la explotación laboral porque hay que dejar muy claro que nadie debe creerse que está por encima de la ley, para que tampoco nadie se aproveche de la vulnerabilidad de la gente que no tiene nada que llevar a casa y por tanto acepta cualquier clase de trabajo, con horas extras sin que se retribuyan, como ocurre en el 60% de los casos, o con sueldos por debajo del salario mínimo interprofesional. Trabajamos en ambas acciones esperando a que se derogue la reforma laboral, que confío que sea muy pronto.

Hace poco dijo que han aflorado unos 3.700 empleos en negro en Islas. ¿Cuántos puestos de trabajo de este tipo calcula que hay?

No me cansaré de reclamar más inspectores de trabajo en Canarias de forma permanente, además del plan de choque que ya comenté. Debemos tener más inspectores y creo que el Gobierno central es consciente de esta necesidad. Un inspector de trabajo no cuesta dinero, sino todo lo contrario por la incidencia que tiene en el afloramiento de la explotación o de puestos de trabajo que no se declaran, por tanto genera riqueza también.

Ha anunciado que en 2016 continuará el Plan de Empleo Social, pero ¿qué más se puede hacer desde el Gobierno para una Comunidad Autónoma como la nuestra que está a la cabeza del país en cuanto a parados?

El Plan de Empleo Social es importante porque no solo permite que desempleados de larga duración y con cargas familiares lleven un sueldo a casa sino que se sientan útiles y por tanto sube la autoestima y la empleabilidad, pero también trabajamos para que la PCI cumpla con su verdadera función que es la inserción de las personas. Nuestra intención es enlazar todas las áreas, coordinar los departamentos y desarrollar planes como los que he comentado y que se están aprobando para atacar el problema desde muchos frentes. Debemos converger desde muchos ámbitos y aprovechar las sinergias que puedan darse como factores de oportunidad.

Se comprometió a frenar los desahucios, primero con la creación de una oficina de intermediación y un protocolo, y ahora ha pedido a la Sareb 50 viviendas para salvar familias. ¿Cómo marchan ambas iniciativas?

Primero nos comprometimos con una oficina de intermediación hipotecaria que se nos ha quedado pequeña y ya se han paralizado los desahucios de entidades financieras a familias en situación de riesgo social. Al final se ha conseguido que aunque pierdan la vivienda por impago, las entidades se comprometan con un alquiler social; se evita el desahucio aunque las familias pierdan la propiedad. De todas maneras hay que cambiar la ley para salvar la situación de los deudores de buena fe. Es imprescindible hacer más, coordinar a los ayuntamientos para los desahucios por alquiler entre particulares y que intervengan los servicios sociales; asesoramiento para evitar cláusulas abusivas, realizar un censo de viviendas vacías y movilizar y ampliar el parque de viviendas públicas. Además confío en que estas primeras 50 viviendas de la Sareb sean un primer paso y podamos disponer de más.

¿La vía diplomática con las entidades financieras está dando sus frutos?

Desde luego que sí.

¿Cuántas viviendas públicas están vacías?

Hay algunas, pero muy pocas.

¿Cuántas familias esperan la adjudicación de una vivienda?

Son alrededor de 15.000.

Anunció que acabará con los sorteos de viviendas de promoción pública. ¿Ya tiene detallado el sistema?

Aún no, pero ya se han enviado cartas a los colegios de trabajadores sociales para que sean ellos quienes digan cómo debe hacerse la valoración. Queremos que sea un proceso transparente y participativo.

Empezó en política muy joven. Con 24 años era senadora, pero hasta hace unos meses no había ocupado ningún cargo de gestión en la administración y esa falta de experiencia se esgrimió en contra suya. Se le ha criticado por ello y también hay quienes la han tachado de no tener suficiente preparación...

(Risas) Prefiero no contestar porque ya contestaron los ciudadanos en las urnas. Soy titulada universitaria y tengo experiencia en gestión en diversos ámbitos y en las Cortes Generales. De todas formas, insisto, en que los ciudadanos son los que ya contestaron en su momento a quienes hablan así y pusieron a cada uno en su sitio. La democracia se basa en esto, en que los ciudadanos deciden quién está capacitado.

¿Cómo lleva compaginar la Vicepresidencia del Gobierno y haber sido madre el pasado mes de agosto?

Con mucho lío. Tengo que confesar que tuve un embarazo estupendo. Como siempre dije, mi hijo quería que ganara las elecciones. Ahora duermo poco, pero soy muy feliz. Veo las cosas de otra manera y las vivo quizás de manera más intensa.

Apenas disfrutó de un permiso de maternidad de seis semanas, y también le llovieron las críticas por ello...

Ese es el tiempo mínimo de permiso de maternidad obligatorio, pero tengo que decirle que el permiso de maternidad lo tiene ahora mi marido y es un derecho al que ninguno de los dos hemos renunciado.

Ha trasladado su residencia al ático de la sede de Presidencia del Gobierno y también la han criticado. ¿Le ha molestado?

Me critican por cualquier cosa, pero no me molesta. Lo que me sorprende es que no hubiera ninguna crítica a quienes lo hicieron antes.

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