La llegada de Pedro Sánchez al pabellón Gran Canaria Arena se convirtió en un todo un revuelo por los simpatizantes y militantes que querían hacerse un selfie con el candidato a la Presidencia, que no se zafó de nadie, sino todo lo contrario, repartió besos y abrazos para todos los que se le acercaron durante el paseíllo hasta el escenario del mitin. Tras él, los 100 elegidos por el partido como claca a las palabras de Sánchez y de los candidatos al Congreso del PSOE y NC, Sebastián Franquis y Pedro Quevedo. Personas que representaban a distintos colectivos, como las juventudes socialistas, muchas mujeres, mayores, aspirantes de otras islas y hasta miembros del grupo afrosocialista. Flora Marimón