La bandera tricolor con las siete estrellas verdes ondea en el centro de la polémica. La enseña, símbolo del sentir de muchos canarios, ha protagonizado en los últimos días un intenso debate en foros y redes sociales tras la retirada de algunas de ellas en la grada curva del Estadio de Gran Canaria. Los aficionados amarillos denuncian en diferentes plataformas que los miembros de seguridad obligaron a quitarla durante el transcurso del partido de Copa del Rey que enfrentó a la Unión Deportiva Las Palmas contra el Eibar el pasado 13 de enero "porque se veía mucho en televisión". El club, a través de su director general de Gestión, Patricio Viñayo, asegura que la decisión corresponde a la Policía Nacional, pero desde la Delegación del Gobierno se matiza que no se dio órdenes para confiscar o incautar la bandera, sino que simplemente se recomendó la retirada de la misma porque en un evento futbolístico es más aconsejable portar símbolos o pancartas deportivas.
Las reacciones a este hecho, que se volvió a repetir en el encuentro que disputó el equipo dirigido por Quique Setién contra el Atlético de Madrid el domingo 17, no se han hecho esperar. El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, el portavoz de CC en la Corporación insular, Fernando Bañolas, o la organización independentista Alternativa Nacionalista Canaria (ANC) ya han manifestado su rechazo a tal decisión.
Morales calificó de "barbaridad" en su cuenta de Twitter la denuncia efectuada por varios seguidores amarillos ya que, recordó, se trata de una bandera legal. "Responde a un sentimiento, por lo que no me cabe en la cabeza que se prohiba un símbolo de estas características porque salga mucho en televisión", remarcó. Bañolas, por su parte, presentó ayer una moción por la vía de urgencia para que sea debatida en el pleno del Cabildo del próximo viernes. El objetivo de la misma es que los hinchas de la UD puedan lucir las banderas, como ha ocurrido desde hace años, en el interior del Estadio de Gran Canaria. El también secretario insular de CC lamenta que se haya realizado una errónea interpretación de la Ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte al equiparar la bandera de las siete estrellas verdes con un símbolo que fomenta la violencia o el terrorismo. En base a ello, Bañolas instará al Cabildo a que muestre su rechazo a la retirada de uno de los "símbolos del pueblo canario" en la próxima sesión plenaria.
Las quejas de ANC van en esta línea. La formación independentista arremete en un comunicado contra la retirada de estas banderas porque entiende que trata de "criminalizar" la representación de un sentimiento, "acusando a quienes la portan de actitudes más propias de quienes reprimen". Denuncian, en este sentido, que los dirigentes de la UD echan "balones fuera" aludiendo a la ley y a instancias policiales. ANC asegura que miembros encargados de la seguridad del club se han dirigido a los aficionados solicitándoles la retirada de la bandera de las siete estrellas verdes por considerarla "ilegal", bajo apercibimiento de posible represalias consistentes en la expulsión del recinto y la retirada del abono.
ANC considera, por ello, que se realiza una lectura manipulada de la Ley contra la violencia y la intolerancia en el deporte -concretamente del punto 1.b del segundo artículo de esta norma- que apunta que puede ser delito o falta tipificada la exhibición en los recintos deportivos de emblemas que inciten comportamientos violentos o sean actos de desprecio a las personas que participan en el evento. Esta misma ley prohíbe -en el punto 1.b del artículo seis- introducir banderas que fomenten la violencia o que afecten a una persona por cuestiones de convicción.
Unos y otros defienden la legalidad de la enseña con las siete estrellas verdes pro cuanto responde, más que a reivindicaciones ideológicas, a un sentimiento de canariedad. Así lo defiende, por ejemplo, Coalición que en cuyos estatutos la defiende como aglutinadora de la identidad de Canarias, "razón por la que preside todos sus actos". Un ejemplo de ello lo protagonizó el Cabildo de Lanzarote en octubre de 2015, mes en el que la corporación insular izó la tricolor con motivo del quincuagésimo primer aniversario de su creación en Argel.
Para conocer el trasfondo de un asunto que ha suscito una enorme polémica, Patricio Viñayo sostiene que el club está a expensas de reunirse con la Policía Nacional, pero desde la Delegación del Gobierno aseguran que no se dará tal encuentro porque "se trata de una cuestión anecdótica".
Protestas
El debate en torno a la legalidad de la bandera de las siete estrellas verdes se ha convertido en un auténtico fenómeno en las plataformas digitales, desde donde se pide, incluso, cantar en los partidos Me gusta la bandera como "toque de atención" a quien tomó la decisión de quitarlas del recinto deportivo. Asimismo, en las horas previas al encuentro que enfrentará a la UD Las Palmas contra el Valencia CF en el Estadio de Gran Canaria mañana, ANC repartirá cientos de banderines con las siete estrellas verdes para que los aficionados las muestren como señal de protesta.
Fuentes de la Delegación del Gobierno insisten en que hay aficionados interesados en buscar polémica donde no la hay, ya que solo se aconsejó retirarla, pero en ningún momento se prohibió portarla porque es una decisión que corresponde a cada persona.
