La magistrada del Juzgado de Instrucción número 4 de Santa Cruz de Tenerife, que instruye la investigación por presuntas irregularidades en la contratación de programas a productoras privadas durante la gestión del exdirector general de Radiotelevision Canaria (RTVC) Guillermo García, citó a declarar ayer en calidad de testigo a Daniel Cerdán, actual comisionado de Transparencia de Canarias y director general del ente público en 2007, antes de que García desembarcara en RTVC. Su comparecencia tenía como objetivo que aclarara la relación de contratos que pudieron firmarse entre RTVC y la empresa Amanecer Latino, propiedad de Francisco Padrón y cuyos contratos son investigados en la denominada operación Gloria.

Cerdán negó taxativamente que hubiera realizado contrato alguno con esta productora durante el tiempo en el que estuvo al frente de la Televisión pública canaria y que solo redactó un documento o "carta de intenciones" el 15 de octubre de 2007 que fue remitida a la Tesorería General de la Seguridad Social con quien la empresa de Paco Padrón mantenía una deuda de más de 900.000 euros.

El motivo por el cual Cerdán redactó dicha carta se debió, según dijo, a que Padrón, cuya empresa había producido diferentes programas para RTVC, quiso firmar una nueva temporada del espacio La Destiladera, pero Cerdán le expuso que ni había partida presupuestaria ni encaje en la parrilla hasta final de año.

Cerdán ratificó que en la citada misiva explicaba que a partir de 2008, Televisión Canaria iba a ampliar el volumen de sus emisiones, sobre todo a través de su segundo canal y añadía que los encargos de producción de programas a Amanecer Latino serían notablemente ampliados con "características que se concretarán -como es norma habitual en esta televisión pública- mediante encargos trimestrales formalizados mediante el oportuno contrato".