Canarias vuelve a convertirse en cita de altos dignatarios europeos por la pausa vacacional de Semana Santa. El primer ministro británico, David Cameron, y la canciller alemana Angela Merkel repetirán en Lanzarote y La Gomera, respectivamente, para pasar unos días de descanso alejados de la vorágine de sus responsabilidades políticas. La última vez que estuvo Cameron en la isla de los volcanes fue hace dos años, mientras que Merkel siente verdadera devoción por la isla colombina, en la que ha estado en cuatro ocasiones para practicar senderismo.

Cameron y su familia volverán a pasar sus vacaciones de Semana Santa en la isla de Lanzarote tal como lo hicieron en la Semana Santa de 2014. En esta ocasión está previsto que el mandatario británico se aloje en un hotel de cinco estrellas de Playa Blanca a diferencia de hace dos años, donde apostó por una casa rural en el Islote de San Bartolomé.

La familia Cameron llegará al aeropuerto de Lanzarote procedente de Londres el próximo jueves día 24, desde donde se trasladarán directamente hasta la localidad turística de Playa Blanca en Yaiza. Aunque oficialmente no ha trascendido aún la visita de Cameron, las fuentes consultadas aseguran que su estancia en Lanzarote se alargará hasta el miércoles 30 de este mes.

El regreso de Cameron a Lanzarote ha sido acogido con gran satisfacción por el sector turístico conejero, no en vano el Reino Unido es el principal país emisor de turistas extranjeros, con más de un millón de visitantes al año. La repercusión de la visita del primer ministro británico hace dos años fue incluso cuantificada por el Cabildo de Lanzarote, que encargó un estudio sobre el impacto publicitario para la isla. Según el informe, las vacaciones de Cameron generaron un valor publicitario en los medios de comunicación de británicos de más de 1,2 millones de euros.

Durante sus vacaciones, la familia Cameron recorrió prácticamente toda la Isla y se dejaron ver en las playas de Famara con una tabla de surf, en restaurantes de Puerto del Carmen, el mercadillo dominical de Teguise, en la playa de Arrieta, en Haría e incluso visitando algunos de los Centros Turísticos del Cabildo.

En esta ocasión se espera que conozca el nuevo museo submarino de Playa Blanca realizado por el escultor británico Jason DeCaires, que el pasado año instaló varias de sus esculturas en la orilla del Támesis en Londres.

Desde hace años, Lanzarote ha sido destino vacacional habitual de numerosos dirigentes políticos. Por esta isla han pasado personalidades como los expresidentes españoles Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero; el expresidente de la República Checa Václav Havel; el expresidente ruso Mijaíl Gorbachov; el alemán Helmut Kohl y, recientemente, el primer ministro irlandés, Michael Higgins.

Por su parte, Angela Merkel se ha convertido en una fiel visitante de La Gomera, a la que acudirá por quinta vez. En esta ocasión, además, parece que seguirá la recomendación que le hizo el ahora presidente en funciones del Gobierno de España, Mariano Rajoy, quien en una reunión celebrada el año pasado en Alemania, aprovechó para recomendarle que volviera de vacaciones a la isla colombina. Rajoy le recordó a su homóloga germana las bondades de la isla canaria, adonde no regresaba desde 2011. Merkel había cambiado en 2013 el destino turístico canario por el de la isla italiana de Isquia para pasar las vacaciones de Semana Santa.

La canciller regresará a La Gomera acompañada de su marido, Joachim Sauer, para disfrutar de una de sus auténticas pasiones: la práctica del senderismo, del que solía disfrutar durante varias horas a diario a través de los senderos que ofrece el Parque Nacional de Garajonay.

El matrimonio llegará en avión al aeropuerto Tenerife Sur-Reina Sofía y desde allí se desplazará en coche hasta el muelle de Los Cristianos, donde embarcará en un fast-ferry que les llevará hasta el puerto de San Sebastián de La Gomera, según fuentes del sector turístico.

El vínculo de Merkel con la isla es bastante profundo, afirman los gomeros que han llegado a hablar con ella, quienes aseguran que la canciller no solo conoce algunas zonas "como la palma de su mano", sino que tiene entre sus platos favoritos el potaje de berros, una delicia típica ideal para reponer fuerzas después de una larga caminata. Pero a la canciller y su marido también han probado el almogrote y los mojos acompañando papas arrugadas y pescado fresco de la zona.

Esta previsto que el matrimonio alemán repita estancia en el Hotel Jardín Tecina, de Playa Santiago.