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Entrevista

Fadel Sid: "La expulsión de la Minurso, el punto más crítico del conflicto"

"Estamos ante un 'show' del Gobierno marroquí que puede acabar en una guerra que no queremos", destaca el Ministro de Cooperación de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD)

El ministro saharaui Bulahi Fadel Sid, ayer durante la entrevista. SABRINA CEBALLOS

¿Es la primera vez que un secretario general de la ONU afirma que el Sahara es un territorio ocupado o hay antecedentes?

No es la primera vez porque las Naciones Unidas considera el Sahara Occidental un territorio no autónomo, por lo tanto ocupado por Marruecos y las diferentes resoluciones del Consejo de Seguridad reflejan ese estatus de ocupación. Si es no es así ¿cuál es el sentido de la presencia de la misión de las Naciones Unidas en el Sahara y el sentido de los acuerdos de alto el fuego de 1991? Por lo tanto el argumento de Marruecos carece de coherencia, se contradice totalmente y lo que pretende hacer es engañar a la opinión internacional, sobre todo a la marroquí. Marruecos también pretende influir en la próxima reunión del Consejo de Seguridad en abril, por lo que se trata de una crisis prolongada producto de la desesperación, el aislamiento y el fracaso.

¿La expulsión de los funcionarios de la Minurso es un punto de inflexión en el conflicto o es un capítulo más del mismo?

Es el punto más crítico del conflicto. Nunca desde el cese de la guerra en 1991 ha estado el conflicto tan frágil y amenazado y el principal responsable es el Gobierno de Marruecos.

¿Les preocupa que Rabat movilizara a miles de marroquíes en dos manifestaciones contrarias a la ONU y a favor de la marroquinidad del Sahara?

Nos preocupa el pueblo inocente marroquí que, 40 años después, sigue totalmente marginado. Son los ministros del Gobierno los principales actores que se ponen al frente de las manifestaciones en contra de Ban Ki-moon. Se trata de un show organizado por el propio Gobierno marroquí porque trajeron a la población inocente de diferentes pueblos del país sin saber para qué iban. Las principales víctimas de este conflicto son los dos pueblos, es decir, el marroquí y el saharaui. Lamentablemente tenemos que reiterar que somos un pueblo vecino y pacífico y esperamos abrir una nueva página para construir un nuevo Magreb. A esta situación sólo se puede llegar respetando el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui, un estado que beneficiaría a España y, sobre todo, a Canarias.

¿La expulsión de la Minurso deja desprotegido al pueblo saharaui y al proceso abierto en el año 1991 para la celebración del referéndum? ¿La ONU puede seguir adelante con el proceso?

Nosotros siempre hemos demandado que la misión, además de controlar el alto el fuego, haga valer el respeto de los derechos humanos que son vulnerados permanentemente por la policía y el ejército marroquíes en los territorios ocupados. Ante la debilidad de la misión y la amenaza a la paz en la región que supone su expulsión, es el Consejo de Seguridad de la ONU el que debe responder porque o contribuye al fortalecimiento de sus propios instrumentos, o estimula la falta de sentido común y la violación del Derecho Internacional por parte de Marruecos.

El portavoz del secretario general de la ONU decía hace unos días que esta situación puede desembocar en un conflicto bélico ¿lo ve así?

Efectivamente. El Frente Polisario ha declarado la alerta ante lo ocurrido porque Marruecos tiene desplegados en el Sahara más de 100.000 soldados a lo largo del llamado 'muro de la vergüenza' y ha desplegado fuerzas en su parte sur.

Permítame el símil¿en caso de conflicto bélico no es comparar un elefante con una hormiga el poderío militar de Marruecos frente a las fuerzas de las que dispone el Polisario?

Si el Derecho está al lado de la hormiga eso le da más fuerza para enfrentarse al elefante. Los años de guerra han evidenciado esa realidad porque el ejército marroquí carece de cualquier motivo y es ajeno porque está lejos de su país y sabe que es una causa perdida, porque es algo que sólo interesa al Trono y al Gobierno marroquí. Sin embargo, los combatientes saharauis están defendiendo su derecho y su tierra y esa es la mayor fuerza moral que está a nuestro lado.

Pero también son conscientes de que Marruecos está respaldado por potencias como Francia o Estados Unidos ¿no?

Estados Unidos es una superpotencia que es consciente de sus responsabilidades internacionales y de su rol en el Consejo de Seguridad. Estados Unidos nunca ha estado tan lejos de Marruecos como lo está ahora, no es que esté más cerca del Polisario pero sí defiende más la legalidad internacional. El caso de Francia no es nada nuevo porque es el principal protector de Marruecos antes y ahora, a cambio de proteger sus intereses económicos y estratégicos en el norte de África. Lamentablemente a Francia no le interesa esta opción, con lo que no contribuye a la mejora social y ecónomica de esta región. Francia debería estar a favor de la legalidad internacional y por una solución pacífica del conflicto.

¿Cómo valora la ambigüedad política en la que se han movido los diferentes gobiernos españoles sobre este asunto?

Vaya por delante nuestro agradecimiento a los pueblos de España y la solidaridad por nuestra causa. Es cierto que los diferentes gobiernos que han habido en España han carecido en estos 40 años de la valentía y el coraje suficientes para enmendar el error cometido en 1975 por el franquismo. Esperamos que algún día un Gobierno español tenga la voluntad de corregir esa herida y cerrarla para siempre.

¿Cómo cree que afectará esta situación a Canarias, apenas a 100 kilómetros del conflicto?

Un conflicto en esta región afecta lamentablemente a Canarias. Europa no debe dejar a Canarias sola ante la amenaza de un conflicto de estas características y debería contribuir con los esfuerzos de las Naciones Unidas para que la región no esté condenada a una guerra que el pueblo saharaui no quiere.

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