Podemos ha calificado este miércoles de "falsos" los dos altercados en el aeropuerto de Gran Canaria que la Delegación del Gobierno en las islas achaca a su diputada por Las Palmas Victoria Rosell, uno en febrero y otro el pasado domingo, y los atribuye a una "campaña de desprestigio".

En un comunicado difundido por la dirección del partido en Canarias, Podemos denuncia que se trata de empañar la imagen de la diputada Rosell, una "persona muy valiosa" para su proyecto político, y lamenta que instituciones que deberían estar al servicio de la gente estén, a su juicio, "en campaña electoral".

Así mismo, asegura que las personas de su partido que ocupan cargos electos no utilizan ni han solicitado nunca acceder a salas de autoridades ni a salas VIP, ni tampoco trato especial alguno en aeropuertos ni en ningún otro lugar, como se ha dicho de Rosell.

Según Podemos, tan "falso" fue el incidente publicado en febrero, con el que "se quiso manipular torticeramente" las preguntas realizadas por Rosell en el aeropuerto de Gran Canaria sobre el uso de la sala de autoridades realizado por otras personas (en alusión al ministro José Manuel Soria), sin pretender que la abrieran para ella, como el supuesto altercado de este domingo.

Sobre este último, Podemos indica que la diputada no se negó a pasar el control de seguridad y que así se ha acreditado.

El partido de Pablo Iglesias dice que, en un lugar donde a nadie se le requiere la documentación, ya dentro de la sala de embarque -situada después de la tienda por la que obligatoriamente tiene que pasar todo pasajero- Victoria Rosell "fue requerida con gritos y malos modos por un agente de la Guardia Civil para identificarse"

"Y manteniendo la calma, pese a la situación vergonzante a la que fue sometida, entregó sus dos identificaciones, el DNI y la tarjeta de diputada, al funcionario", añade.

Según esta formación política, algunos "no asumen aún los resultados de las últimas elecciones generales" y "muestran gran nerviosismo ante la posibilidad de un gobierno de cambio, por lo que están dispuestos a no reparar en gastos, con dinero público e incluso en actuaciones ilegales, para tratar de desacreditar a Podemos, utilizando las instituciones del Estado contra el rival político".

Podemos añade que en esta "indigna" actuación de quienes consideran las instituciones públicas "como su cortijo particular" se enmarca la campaña que perciben contra Victoria Rosell, a la que denuncian que se pretende hacer pagar por su trayectoria de "lucha contra la injusticia y la corrupción".