No cabía ni un alfiler en la sede del PP en Las Palmas de Gran Canaria por la reunión del comité regional y de la junta directiva del partido, con representantes de todas las Islas, presidentes insulares y cargos públicos. Frente al ruido que se ha oído esta semana por el apoyo de la dirección nacional a Antona en sustitución de Soria, tras la renuncia a todos sus cargos, ayer no se produjo ninguna crítica. Caras sonrientes y aplausos en distintas ocasiones.
La primera cuando entró Soria sin que nadie lo esperara y ocupó su sitio en la mesa presidencial. Se formalizaba su renuncia y la elección de su sustituto como presidente del PP en Canarias, Asier Antona. Más aplausos cuando habló para pedir el apoyo del partido a la nueva dirección regional y, de nuevo otra vez, cuando María Dolores de Cospedal y Antona se refirieron a él. La secretaria general comentó su "raza política , vocación de servicio público y entrega en cuerpo y alma". Y agradeció su trabajo con "mucho cariño y mucho amor, ¿por qué no decirlo?", cuestionó De Cospedal.
Lo mismo que Antona que señaló: "Quién me lo iba a decir que sea yo el que te marque una directriz. Y la primera es: José Manuel, no te vayas muy lejos porque te vamos a necesitar muy cerca".