La dirección insular en La Palma de Podemos da un portazo a los dirigentes regionales y nacionales de la formación morada y dimite en bloque el Consejo Ciudadano Insular y la Secretaría General Insular de Podemos de todos sus cargos orgánicos y de militancia. La drástica decisión adoptada ayer tras celebrar una asamblea extraordinaria se produce, según manifiestan, por la "pérdida de confianza en los dirigentes del partido así como por las discrepancias políticas surgidas con sus representantes en Madrid ante la forma en la que han llevado a cabo las negociaciones con el partido socialista para que fraguara un gobierno del cambio que desalojara a Mariano Rajoy y al PP de la Moncloa.
Los representantes insulares acordaron "por unanimidad, y con efecto inmediato e irrevocable, dimitir de todos los cargos y órganos representativos por la pérdida de confianza en los dirigentes del partido y ante la inevitable convocatoria de unas nuevas elecciones generales", según un comunicado.
Al mismo tiempo han decidido "presentar la baja como afiliados a Podemos" y "liberarse así del compromiso del voto cautivo por militancia", señalan y añaden que "desde que aceptamos nuestra responsabilidad como Consejo Ciudadano Insular, tras ganar las elecciones democráticas de febrero de 2015, no hemos recibido, en ningún momento, por parte de las ejecutivas Autonómica y Nacional, ni apoyo, ni respaldo, ni crítica, ni rechazo alguno a nuestra gestión, lo único que nos han aportado durante este período de tiempo es una situación de total aislamiento y el sentirnos totalmente ignorados y manipulados al mantener publicitariamente el Consejo Ciudadano Insular, como un órgano meramente folclórico", según denuncian.
El Consejo Ciudadano Insular explica que dentro de sus funciones está "el control y denuncia de comportamientos contrarios al Código Ético interno de Podemos, sobre actuaciones y decisiones tomadas por los responsables del partido en La Palma y por extensión en Canarias" sin embargo, señalan que sus representantes políticos palmeros les "fueron impuestos desde Gran Canaria". Afirman que "todas las denuncias presentadas por mala praxis, irregularidades, abuso de poder y acoso de dirigentes canarios y palmeros ante la Comisión de Derechos y Garantías Estatal de Podemos no han merecido ni un acuse de recibo".
Los exdirigentes insulares abandonan la formación porque no quieren ser "cómplices de actuaciones endogámicas y prepotentes". "Decimos basta ya de engaños".
