La Fundación César Manrique se muestra especialmente crítica con el anteproyecto de la Ley del Suelo, exige su retirada y hace un llamamiento a la sociedad para movilizarse en su contra. La entidad cree que el texto tendrá efectos "demoledores" para el futuro inmediato del territorio y los recursos naturales de Canarias por eliminar de un plumazo "cualquier atisbo de equilibrio entre el desarrollo urbanístico, la actividad económica y la protección del medio".

En sus alegaciones, la Fundación César Manrique considera que se trata de una norma "muy ideológica" y, a la vez, "tecnocrática" que "contenta a las patronales y pone en riesgo el bien común". Cree inexplicable que se desvincule la ordenación del territorio del turismo y advierte de un futuro conflictivo debido a la judicialización que se prevé en el planeamiento del suelo por la "municipalización" del mismo. "Hay una verdadera involución, en la que resulta altamente significativa la grave sustitución de la Cotmac", asegura la Fundación, otorgándole las competencias a cabildos y ayuntamientos, apenas sin precedentes en el resto del Estado. En su opinión, se abre la puerta a la "conflictividad judicial" y a las "distorsiones" entre los intereses privados y públicos, lo que desembocará en más inseguridad jurídica.

También se muestra rotunda la Fundación en contra de la ampliación ilimitada de los usos en el suelo rústico ya que "podrá ejecutarse cualquier ocurrencia para fomentar la especulación y descoyuntar el territorio con nuevos equipamientos, más infraestructuras, ofertas de ocio banales, deterioro de la calidad paisajística y menoscabo de la singularidad turística que caracteriza a Canarias".