El Gobierno de Canarias no quiere perder el talento joven que la crisis se llevó hacia otros países. Las direcciones generales de Juventud y de Emigración elaboran para ello un plan que tiene un triple objetivo: calcular de forma fehaciente el número de jóvenes que residen fuera de las Islas; facilitar el regreso de los que así lo deseen; y aprovechar al máximo las capacidades de aquellos que aunque continúen sus vidas en otros lugares, tengan qué apor- tar al futuro de la Comunidad Autónoma.
El director general de Juventud del Ejecutivo regional, José Téllez, explicó ayer que el fin último de este programa de enlace con jóvenes canarios en el exterior es "crear un vínculo" con aquellos a quienes la crisis obligó a hacer las maletas rumbo el extranjero; en definitiva, tratar de que estos "no sientan desapego" y, al mismo tiempo, hacerles ver el interés de la Administración autonómica tanto por su futuro como por su trabajo y formación.
Con el apoyo de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (Aciisi) y de la Sociedad Canaria de Fomento Económico (Proexca), una primera fase del programa se centrará en la identificación efectiva de esos jóvenes canarios que han emigrado a Europa o América en busca de un mejor futuro. En la actualidad, las estadísticas al respecto no son del todo fiables, ya que muchas de las personas que marchan hacia el extranjero no se inscriben en los censos de residentes ausentes, lo que impide su contabilización. Los últimos datos del INEM, que datan de 2014, calculan en 1.469 el número de jóvenes isleños que habían abandonado el Archipiélago hasta ese año del total de 168.000 caarios que viven en el exterior, pero esas cifras no convencen al Ejecutivo. "Muchos son reacios a registrarse porque tienen la percepción de que pueden perder derechos", puntualizó Téllez. Este proceso de identificación se llevará a cabo por medio de redes sociales de todo tipo (científicas, tecnológicas...), de las oficinas consulares, de las embajadas, de las delegaciones del Gobierno canario (allí donde las hubiere), de asociaciones de emigrantes, etcétera.
Una vez termine ese proceso de localización, el programa prevé el desarrollo de una herramienta tecnológica, una aplicación (app), que posibilitará el intercambio de información entre las direcciones generales de Juventud y de Emigración con esos jóvenes residentes en Europa o América.
La aplicación no solo facilitará el contacto con los emigrados, sino que también les suministrará información, por ejemplo, sobre la situación en que se encuentran los sectores de ocupación en las Islas o sobre las posibilidades de emprendimiento. La app servirá también para guiar a aquellos dispuestos a regresar a la región, de modo que puedan saber, en la medida de lo posible, qué les deparará su vuelta.
La idea del Gobierno regional es aprovechar el talento incluso de quienes ya no deseen volver al Archipiélago, especialmente de aquellos con aportaciones empresariales, científicas o tecnológicas. Para ellos, se intentará relacionar a esos jóvenes talentos emigrados con personas de su mismo ámbito de estudio que sí desempeñen su labor investigadora o científica en la Comunidad Autónoma. Se trata, por ejemplo, de que la labor de ese joven investigador canario que trabaja para un instituto de Frankfurt redunde de algún modo en beneficio de la comunidad científica de las Islas.
