El Parlamento de Canarias aprobó ayer por unanimidad una Proposición No de Ley conjunta de todos los grupos en la que se declara el robo de bebés como "crimen contra la humanidad". Además, solicitó al Gobierno central la creación de una base nacional de datos genéticos y la repetición de las pruebas de ADN. La Cámara hizo un llamamiento urgente al Gobierno de España y a la Fiscalía para que pongan en marcha una investigación "efectiva y real" de todos los casos de bebés robados durante la dictadura y los primeros años de democracia.

En su proposición, los diputados exigen que la investigación se amplíe a los archivos eclesiásticos y de las clínicas donde se realizaron las desapariciones, de ahí que se inste a la Iglesia a prestar su colaboración. La iniciativa también recoge que el 30 de agosto se declare como Día en memoria de los bebés robados y sus familias, en un intento por conmemorar un drama que afecta a miles de personas en toda España. La puesta en marcha de una unidad policial de búsqueda de bebés robados siguiendo la experiencia que se puso en marcha en Argentina desde los años 80 es otra de las propuestas que aprobó ayer el Parlamento canario.

De la misma forma, reconoce que son igual de víctimas los menores sometidos a desaparición forzada y posterior compraventa o entrega como sus madres, padres y hermanos o el resto de su familia. Con esta proposición, el Parlamento demuestra su compromiso de seguir apoyando a todas las víctimas y asociaciones de afectados en Canarias por estos "graves crímenes".

Desde la tribuna, observando con detalle, un centenar de afectados y miembros del Colectivo Sin Identidad llegados desde diferentes puntos de España observaban cómo el Parlamento de Canarias hacía historia al convertirse en el primero en tratar el caso de los bebés robados y realizar un pronunciamiento para reivindicar una investigación a fondo.

Miguel Ángel Rodríguez, abogado del Colectivo Sin Identidad que aglutina a los afectados por el robo de bebés, destacó el hecho de que por primera vez en España un Parlamento regional reconozca que es necesario llevar a cabo una investigación profunda sobre esta problemática. "Pedimos que el Estado se implique porque no es responsabilidad de las víctimas investigar. Tiene que hacerlo quien tiene los medios y el poder para hacerlo", concretó el letrado.

Melodie Mendoza, portavoz del grupo mixto, aprovechó su intervención ante la Cámara para poner voz a los afectados y miembros del Colectivo Sin Identidad. Aseguró con sus palabras que hay que ser "inflexibles" para zanjar esta problemática. Los menores, a su entender, son los grandes "desgraciados" de la sociedad porque no conocen su origen, algo por lo que han sido "burlados" a lo largo de tantas décadas.

La diputada de Nueva Canarias Esther González manifestó que las familias que buscan a sus bebés "están solas", sin apoyo de los gobiernos, la ONU o la Unión Europea. Se trata de padres que, desde su punto de vista, llevan años sufriendo por haberse visto despojados de sus hijos y sin saber nunca cuál ha sido su paradero. "Los bebés robados siguen en el punto de partida" porque solo las familias los buscan, con sus propios recursos, remarcó.

Francisco Déniz, del grupo Podemos, manifestó que es de justicia la aprobación de esta proposición, aunque recordó que en el documento que han aprobado todas las formaciones por unanimidad no se hace referencia en ningún momentos a las "elites franquistas" y la jerarquía eclesiástica que se beneficiaron de la venta de niños robados hace décadas. "Las élites no pueden seguir impunes ante la ley; que se investigue y depuren responsabilidades", destacó el parlamentario.

El diputado del PP Emilio Moreno puso de manifiesto que el robo y tráfico de bebés es "un auténtico drama" que duró 50 años y que debe avergonzar a toda la sociedad. Las administraciones, después de tener conocimiento de estos casos, "han mirado para otro lado". Gustavo Matos, del PSOE, se mostró indignado y a la vez con un hilo de esperanza por lo que los diputados iban a votar. Durante su intervención, aprovechó para recordar "la maquinaria franquista" que provocó que muchas madres perdieran a sus hijos al serles arrebatados de sus brazos. Tanto Moreno como Matos se refirieron a casos reales de madres que han perdido a sus hijos sin saber cuál fue su paradero.

La diputada de Coalición Canaria Migdalia Machín destacó durante su intervención la necesidad de que las instituciones se conciencien de la "atrocidad acometida" y que la justicia ayude a esclarecer "tanto oscurantismo". Además, valoró que "no se puede avanzar si las heridas del pasado no dejan de sangrar". "Se trata de una las etapas más crueles de la historia de Canarias", aseguró para añadir después que las madres "no renunciaron a sus hijos, se los quitaron".