El Consejo de Gobierno dio ayer forma a su iniciativa de fomentar la presencia de productos canarios en los contratos que firma con entidades privadas para la adquisición de suministros agroalimentarios. En la práctica eso significará que, por ejemplo, los 69.300 escolares que comen de manera habitual en los colegios de las Islas verán cómo en los menús cobran mayor protagonismo los ingredientes gestados en las Islas.
Ese es solo un ejemplo de los expuestos ayer por el consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Ejecutivo canario, Narvay Quintero, quien también señaló que la Sanidad canaria cuenta con "una partida de contratación de 6,3 millones de euros" para este capítulo. La medida, que adelantó LA PROVINCIA en junio, persigue el incremento de las producciones locales, es decir, "favorecer la promoción y comercialización de productos agroalimentarios" del Archipiélago, según detalló Quintero.
Además, en el caso de la agricultura, el consejero señaló que las directrices aprobadas ayer permitirán atraer hacia métodos de cultivo ecológicos a cada vez un mayor número de productores. Claro que la implantación habrá de abordarse de un modo progresivo. "De lo contrario, nos podemos encontrar con que hay producciones que no tenemos todo el año", explicó Narvay Quintero, en referencia a los frutos y hortalizas de temporada; lo mismo ocurre con las carnes y los pescados.
Lo que sí tiene claro el responsable del sector primario isleño es que la preeminencia del made in Canarias en los contratos no supondrá ninguna elevación de los precios. "Estas son unas directrices de contratación y entiendo que el impacto [presupuestario] será cero", afirmó. Lo único que se hace es priorizar un producto de proximidad y fresco. "No son más caros los productos locales que los productos del exterior, no tienen por qué ser más caros", apuntó.
Mandato de Europa
La iniciativa cubre también un mandato de la Unión Europea (UE), que obliga a "apoyar la producción local, de cercanía", como mejor modo para salvaguardar los paisajes, la calidad de los ecosistemas y reducir la huella de carbono, esto es, aminorar la presencia de gases nocivos en la atmósfera. Solo el transporte de la mercancía genera unas emisiones que son menores en la medida en que se acorte la distancia con el destino final.
En el orden de prioridades también entrarán en escena "la calidad diferenciada", en palabras del consejero. Es decir, los sellos que garantizan el origen de una parte de la producción canaria, ya sea en forma de indicación geográfica protegida (IGP) -caso del plátano-, denominaciones de origen -quesos y vinos- o sellos RUP (regiones ultraperiféricas).
La directrices aprobadas ayer son otro paso en la política de potenciaciación del campo y el mar canarios, uno de los principales pilares de la gestión desde la llegada al cargo de Narvay Quintero, quien ya ha conseguido sumar a dos cadenas hoteleras -Iberostar y Grupo Lopesan- para conseguir una mayor presencia de productos canarios en sus bufés.
En el acuerdo también está implicada la Consejería de Hacienda, que dirige Rosa Dávila, competente para el establecimiento de los parámetros de la contratación. El documento final establecerá unos porcentajes mínimos de presencia de productos canarios que podrán incrementarse de manera progresiva.
Narvay Quintero destacó que Canarias es una de las primeras comunidades autónomas en establecer unas directrices de este tenor y señaló la importancia que van a tener para que el sector primario isleño cobre impulso.
