El presidente del Gobierno regional, Fernando Clavijo, exhortó ayer a Nueva Canarias (NC) a poner en práctica un impuesto turístico en Gran Canaria. "Háganlo, experimenten", apremió el jefe del Ejecutivo autonómico al líder de NC, Román Rodríguez, cuyo partido está a la cabeza del tripartito que también integran Podemos y el PSOE y que dirige el Cabildo insular. No en vano, y ante la insistencia de NC, que lleva varios plenos criticando que Clavijo haya desechado la ecotasa al contrario de lo aprobado recientemente en Baleares, el presidente del Ejecutivo autonómico avanzó que dispone de informes que garantizan que los cabildos sí pueden aplicar el controvertido impuesto.
Román Rodríguez expuso durante la sesión plenaria celebrada ayer en la Cámara regional que la "extraordinaria" coyuntura de la que disfruta el turismo debe aprovecharse para mejorar el destino, el empleo y, en general, "el bienestar social", esto es, "que la riqueza se reparta". El dirigente de NC ahondó en esta idea y explicó que "la gran tarea pendiente" en relación con el sector turístico es "definir" su modelo, un modelo que, en cualquier caso, ha de fundamentarse en la "calidad" y no en la "cantidad" y perseguir el "interés general", defendió. Rodríguez contrapuso esa apuesta por la calidad a lo anticuado de determinadas zonas turísticas y sacó a colación las "propuestas" que su partido ha hecho para paliar la merma en las arcas públicas y poder acometer la reforma de esos espacios, entre ellas la polémica tasa.
Clavijo afirmó que su gobierno está de acuerdo en el fondo del planteamiento de Nueva Canarias, es decir, en la necesidad de apostar por un modelo basado en la "excelencia turística", aunque a renglón seguido puntualizó que en lo que no estarán de acuerdo en ningún caso es en la tasa turística, un tema "recurrente", lamentó. "Ponga la tasa turística en Gran Canaria", instó el presidente a Rodríguez, quien desde su escaño negaba con la cabeza, gestos a los que Clavijo respondió asegurando que cuenta con informes que garantizan que las corporaciones insulares pueden aplicar en sus territorios, en sus respectivas islas, el controvertido impuesto. "Hágalo en Gran Canaria, experimente", insistió el también secretario general de Coalición Canaria en Tenerife, que puso énfasis en que su Gabinete ha apostado por la "mejora" (subida) del Impuesto General Indirecto Canario (IGIC) para incrementar los recursos, lo que también ha redundado en beneficio de las entidades locales, habida cuenta de que la subida del tributo regional por excelencia también "engorda" las arcas de cabildos y ayuntamientos.
Clavijo admitió, eso sí, que la política de reforma y mejora de espacios públicos turísticos se está topando con "dificultades" a consecuencia de las estrecheces presupuestarias. Unas "dificultades" que, no obstante, podrán solventarse con dos de las grandes apuestas del Ejecutivo de la comunidad autónoma: el Fondo de Desarrollo y la polémica ley del suelo. El nacionalista recordó que las corporaciones municipales podrán acogerse al Fondo de Desarrollo, que se nutrirá de los recursos del extinto ITE (Impuesto general del Tráfico de Empresas) con un montante de 160 millones anuales . Y asimismo aseguró que la ley del suelo contribuirá a desbloquear los planes de rehabilitación y que, por tanto, ayudará también en la mejora de los espacios públicos. "Pero insisto: no vamos a estar de acuerdo en la tasa turística", repitió.
NC viene insistiendo ya desde el año pasado en los beneficios que la ecotasa (una cantidad que gravaría la estancia de los turistas en la Comunidad Autónoma) reportaría a la economía de las Islas. El partido que dirige Román Rodríguez calcula que su puesta en práctica incluso repercutiría en la creación de puestos de trabajo, en concreto unos 5.000. Esta tasa , que NC calcula en alrededor de un euro o 1,5 euros por noche de estancia, se está aplicando desde el pasado día 1 en Baleares a razón de entre 50 céntimos y dos euros por noche de estancia en hoteles, apartamentos o albergues. El Govern balear espera recaudar unos 70 millones anuales. Las patronales turísticas, también las de Canarias, han rechazado abiertamente la aplicación de una medida en la que ven "afán recaudatorio".
