Segundo enfrentamiento consecutivo de un consejero socialista con el presidente Fernando Clavijo. Si la semana pasada la trifulca fue con la titular de Obras Públicas y Transportes, Ornella Chacón, a cuenta de los desequilibrios en la inversiones en carreteras entre Tenerife y Gran Canaria, ahora el protagonista es el consejero de Sanidad, Jesús Morera, que discrepa de la distribución de los fondos del crédito extraordinario destinados a su consejería. Según fuentes cercanas al Ejecutivo, el Consejo de Gobierno del jueves vivió la situación más tensa de lo que llevamos de legislatura debido a la fuerte discusión protagonizada por Morera, Clavijo y el viceconsejero de la Presidencia, José Miguel Barragán.
El debate sobre el reparto de los fondos fue agrio, bronco y, en ocasiones, a gritos entre el consejero socialista y los dirigentes nacionalistas, según las fuentes consultadas. Sanidad había solicitado en su propuesta una cantidad mayor a la que finalmente se le otorgó, igual o superior a la de Educación -cerca de 13 millones de euros- y que se quedó en diez millones.
El malestar del consejero no fue solo por la insuficiente financiación sino porque de esa cantidad casi la mitad -4,8 millones- irá destinada al hospital del sur de Tenerife para abrir nuevas camas. Al igual que sucedió con Chacón, las presiones desde el Cabildo de Tenerife y las críticas que, con regularidad, se lanzan desde la Corporación insular hacia las áreas socialistas han terminado con nuevos enfrentamientos en el seno del Ejecutivo.
Los fondos para el centro del sur de Tenerife dejan al área sanitaria con poco más de cinco millones de euros, cantidad claramente insuficiente para las necesidades demandadas por el departamento que dirige Morera para cubrir las carencias de personal y mitigar las listas de espera.
El hospital del sur de Tenerife ha sido en varias ocasiones causa de polémica política entre el Cabildo de Tenerife y la Consejería de Sanidad. El presidente tiner- feño, Carlos Alonso, reprochó recientemente a la vicepresidenta Patricia Hernández y al consejero Jesús Morera que fueran a visitar las obras del centro sanitario sin que se le informara previamente y no se invitara a la Corporación insular, que también ha partici-pado en la financiación de esta infraestructura.
Hace algunas semanas se abrieron las primeras camas de hospitalización, un total de 46, y para el mes de septiembre está previsto que ya estén operativas 49 plazas más para atender la demanda de atención especializada en la zona sur y suoreste de la isla. Asimismo, se encuentra en marcha la tercera fase del proyecto, por lo que desde el Gobierno regional se siguen inyectando fondos y los 4,8 millones del crédito extraordinario van destinados a este fin.
El presupuesto de Sanidad en las cuentas autonómicas de 2016 apenas se incrementó un 1%, lo que supuso 25 millones de euros más, hasta los 2.643 millones. Entre las infraestructuras prioritarias de este ejercicio se encuentra el hospital de Fuerteventura, centro que también lleva varios años en ejecución y que las instituciones majoreras han exigido que finalice cuanto antes, y los hospitales del norte y sur de Tenerife.
Desequilibrios
El descontento de la Consejería de Sanidad con los fondos que le ha tocado del crédito extraordinario llega unos días después de la tensión política protagonizada por el presidente del Cabildo tinerfeño con la consejera de Obras Públicas, Ornella Chacón. El presidente del Gobierno confirmó que existe un desequilibrio en las inversiones de carreteras a favor de Gran Canaria, lo que contrastaba con los informes del departamento, que verificaban el equilibrio entre ambas islas. La polémica no llegó al Consejo de Gobierno como ha pasado con Sanidad y por ahora se han apaciguado los ánimos.
Las tensiones entre socialistas y nacionalistas desde que se inició la legislatura salpica tanto a las relaciones de los partidos como a la gestión del Ejecutivo. La principal piedra de toque es la ley del suelo, iniciativa legislativa que ha pasado dos veces por el Consejo de Gobierno con el beneplácito de los consejeros del PSOE, a pesar del fuerte debate interno que el texto ha generado en el partido. Según fuentes socialistas, las reuniones del grupo parlamentario con algunos consejeros han evidenciado que éstos no conocen los entresijos de la ley y que tampoco desde los órganos del partido hay directrices claras sobre la misma para posicionarse. Sin embargo, aún queda un nuevo debate en el Consejo de Gobierno antes de que se remita al Parlamento, cuando el Consejo Consultivo emita su dictamen y se introduzcan las observaciones del mismo.
Según las fuentes consultadas, el enfrentamiento en el Consejo de Gobierno entre Morera y Clavijo no cuestiona por ahora la continuidad del consejero de Sanidad en su puesto, si bien en ambos casos tanto Chacón como Morera salen debilitados. En el caso de que haya cambios de nombres en algunos cargos del Ejecutivo para después del verano, tal y como ha apuntado el propio presidente, los que más suenan por parte del PSOE vienen de las áreas de Sanidad y Obras Públicas, que son las más cuestionadas desde diversos sectores.
