El comité de huelga del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC) exige mantener los términos del acuerdo aprobado por los trabajadores en la asamblea celebrada el pasado 11 de julio, afirma CCOO en un comunicado.

En caso contrario, habría que volver a votar el documento alterado por la gerencia del ITC, ya que éste cambia "sustancialmente" lo que se votó, asegura el sindicado.

El comité desmiente a la Consejería de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento del Gobierno de Canarias cuando afirma que el comité de huelga aceptó dichos cambios.

"Las decisiones de un comité de huelga, como ha de saber la Consejería, deben manifestarse expresamente y por escrito y no con un 'al parecer', como afirma el Gobierno en una nota remitida a los medios", afirma CCOO.

Asimismo, considera inapropiado que el Gobierno canario acuse a los trabajadores de pretender "paralizar o dilatar la firma del acuerdo", cuando las actas del Tribunal Laboral Canario consta que fue la gerencia del ITC quien solicitó el aplazamiento de la reunión del pasado viernes y "cuando fue la gerencia del ITC la que argumentó que el documento no podía firmarse porque no contaba con la aprobación del gobierno".

Según CCOO, el comité está "plenamente dispuesto" a firmar el documento "inmediatamente" si se trata del aprobado por los trabajadores, "máxime cuando la propia gerencia reconoce que los cambios no son sustanciales".

A juicio del comité, "si ellos creen que no tienen sustancia, que no añaden nada a lo votado, entonces aceptarán que no hace falta incluirlos".

Para el comité de huelga, la gerencia del ITC tiene dos opciones: o elimina las alteraciones añadidas al documento con posterioridad a la votación o acepta que se tenga que volver a votar el documento alterado.

"Lo que resulta inmoral es pedir al comité de huelga que firme lo que traiciona la voluntad de los trabajadores al ejercer el voto", afirma en la nota.

Según los representantes de los trabajadores, "cuando se decidió someter a votación el documento, el comité de huelga se comprometió a aceptar el resultado fuera cual fuera. Lo que ahora cabe esperar es que la gerencia tenga el mismo respeto democrático".

El comité de huelga considera que la reacción de la Consejería volviendo a culpar a los trabajadores "no es más que otra cortina de humo para ocultar peores condiciones laboral y, sobre todo, desviar el tema de lo verdaderamente importante, que consiste en que el Gobierno canario se comprometa de una vez con la viabilidad del ITC".

Por su parte, el secretario general de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de Comisiones Obreras Canarias, Pedro Moreno, condena que la Consejería vuelva a "optar por la estrategia de culpar a los trabajadores ante la opinión pública y amenazarlos otra vez con cerrar el Instituto si no votan lo que ellos quieren y aceptan sumisamente los cambios que a ellos se les antojen".

A su juicio, "resulta deplorable ver actuar al Gobierno canario en términos similares a los de esos empresarios sin escrúpulos a los que poco o nada les importa la dignidad de los trabajadores".