Tras un año al frente de la Consejería de Sanidad, el socialista Jesús Morera, ve la gestión desde otro prisma. En noviembre, en la Comisión de Presupuestos en el Parlamento vendió que los fondos de su área para 2016 eran "suficientes" y garantizó que "las necesidades" iban a estar cubiertas, se podría contratar a personal en Urgencias y se atenderían "todas las prestaciones sanitarias adecuadamente". "No hemos perdido dinero, ganamos 25 millones y vamos a poder hacerlo mejor que el año pasado, quiero que quede claro". Pero su declaración de intenciones se ha topado con la realidad, ya que no sólo se ha producido un desvío presupuestario que podría alcanzar los 150 millones de euros a finales de este año, sino que las listas de espera, lejos de reducirse, se han disparado. Es más, Sanidad augura que "empeorarán".
Hace once meses Morera defendió que el peso de Sanidad ha subido en los años de crisis y sigue al alza para situarse en el 42,05% del presupuesto autonómico, 0,6 puntos porcentuales más que en 2015, esto es, 25 millones de euros más. En aquel entonces comprendió la restricción presupuestaria porque había "otras prioridades" y aseguró que no había "margen para aumentar las cantidades". Así, con el incremento tenía previsto reiniciar obras suspendidas hace años y acometer un plan de listas de espera.
Sin embargo, este martes su discurso dio un vuelco en el pleno en la Cámara. "Para no llevarnos a engaño, es muy posible que en el segundo semestre y con las dificultades presupuestarias que tenemos, las listas de espera vayan a empeorar en su volumen y en sus indicadores", confirmó. De hecho, la lista de espera quirúrgica ha aumentado un 8,5% en trece meses, en alrededor de 2.500 pacientes, "un mal dato", admitió el consejero.
Y eso a pesar de que en este primer semestre "ha crecido la actividad quirúrgica en los hospitales". ¿Por qué pese a que se ha operado más hay más lista de espera? "Porque están entrando más pacientes en la lista de los que somos capaces de sacar, cada vez hay más demandantes de cirugía", argumentó en el Parlamento, donde lamentó que "ante la falta de medios económicos suficientes nos toca seguir realizando esfuerzos en la gestión, aunque es un aspecto en el que cada vez queda menos margen de mejora". Asimismo, se quejó esta vez de que el crédito inicial para Sanidad en 2016 es "120 millones de euros menos que el gasto real en 2015".
Culpó al Gobierno central de la merma de fondos, que provocarán "ajustes" y limitarán los programas especiales relativos a pruebas diagnósticas e intervenciones quirúrgicas, por lo que se elevarán los tiempos de demora y los pacientes en espera. Insistió en que el problema radica en la "insuficiente" financiación del Estado y pidió un acuerdo entre los partidos en esta "guerra".
"Busquemos soluciones para ver de dónde sacamos el dinero para tener la Sanidad que queremos", añadió Jesús Morera, que es de los que ve "el vaso medio lleno" y sostuvo en su intervención: "Si hemos logrado ser capaces de arreglar algo con un limitado presupuesto, cuando empiece a llegar dinero en algún momento estarán sentadas las bases para obtener mejores resultados".
