El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, defendió este viernes la autonomía local e insular y alertó de que el territorio no puede quedar a merced del libre juego del mercado, por lo que solicitó en el Parlamento canario una modificación significativa del proyecto de Ley del Suelo.

El presidente compareció en la Comisión de Cabildos de la Cámara regional para exponer la posición del Gobierno de Gran Canaria ante uno de los grandes temas que debe preocupar a los responsables públicos, ya que la gestión y preservación del territorio es un elemento estructurante de la convivencia y el desarrollo económico.

"El Cabildo de Gran Canaria reconoce la ineludible necesidad de formular una ley sobre el territorio", pero siembre bajo la premisa de mantener dos criterios históricamente aplicados en la legislación territorial y ambiental canaria: la sostenibilidad y el consenso.

Además, "no podemos desarticular Canarias en 88 planeamientos inconexos que rompan la necesaria coordinación general, es un error creer que lo que planificamos en Gran Canaria no tiene incidencia en el resto de las islas. Hemos realizado grandes esfuerzos que articulan un mismo país desde Órzola hasta Maspalomas, desde Las Canteras hasta Valverde. Este proyecto de Ley rompe la idea de país canario", sentenció Morales, quien defendió la imperiosa necesidad de no derogar la Directrices Generales de Ordenación, sino impulsar su revisión.

Antonio Morales subrayó que la defensa de la autonomía local, compatible con la aprobación de los planes insulares por los órganos autonómicos y de los planes municipales por los insulares, fue una de las propuestas remitidas al Gobierno canario, pero "incomprensiblemente no fue aceptada".

La isla, prosiguió, debe ser la unidad básica de ordenación territorial y de sus recursos naturales, pero el proyecto de Ley reduce "drásticamente" el contenido de los instrumentos insulares y de su capacidad de intervención, limitada a meros informes sectoriales. "Los informes supramunicipales deben ser preceptivos y vinculantes".

Alarma por el suelo rústico

Con la actual redacción aumenta el peligro de ocupación del suelo rústico con actuaciones y usos ajenos a la actividad agraria, según el presidente del Cabildo de Gran Canaria.

Así, Morales se opuso al planteamiento del texto que da prioridad al ´desarrollo económico´ sobre el desarrollo sostenible en los tiempos de crisis. "Nuestro suelo es un valor estratégico que no puede vincularse a intereses cortoplacistas de algunos sectores", añadió.

Antonio Morales consideró que Canarias está ante el debate de quienes apuestan, como el Cabildo de Gran Canaria, por un desarrollo respetuoso con el medio ambiente y quienes, por otra parte, consideran que el desarrollo económico justifica una ocupación del suelo que modifica los valores medioambientales de Canarias. Sin embargo, considera que ello no puede saldarse con el debate habido en la tramitación de la norma. "Son cuestiones demasiado trascendentes para resolverlas en este clima y con estas diferencias", señaló.