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Nueva tensión entre los socios de gobierno Los municipios ponen el pacto al borde de la ruptura

El PSOE amenaza con arrebatar a CC La Laguna si pierde Granadilla

Máxima tensión entre los socios del Gobierno regional ante la censura que se debate hoy - Clavijo y Hernández negocian hasta la última hora para salvar el pacto

Francisco Hernández Spínola, Julio Cruz y José Miguel Barragán durante las negociaciones del pacto regional. LP/DLP

El PSOE levanta la veda en los ayuntamientos y cabildos donde tiene pactos con Coalición Canaria. Los socialistas no están dispuestos a tragar la maniobra realizada por sus socios para evitar expulsar a sus concejales en Granadilla de Abona y frenar la moción de censura, por lo que el Ayuntamiento de La Laguna se coloca en el punto de mira de la crisis que atraviesa las relaciones entre ambos. Si al mediodía de hoy Coalición desaloja al PSOE de la Alcaldía del municipio del sur de Tenerife, los socialistas se sentirán liberados de los pactos en cascada firmados con los nacionalistas y el primer municipio en caer será San Cristóbal de La Laguna.

El órdago de los socialistas es una carga de profundidad en toda regla, no en vano se trata del ayuntamiento del que fue alcalde el actual presidente, Fernando Clavijo, y es un buque insignia para CC de Tenerife junto al Ayuntamiento de Santa Cruz y el Cabildo. En el ayuntamiento lagunero la suma de los concejales del PSOE, Podemos y Nueva Canarias sería suficiente para desalojar al alcalde José Alberto Díaz. Desde el minuto uno del actual mandato la gobernabilidad de la Ciudad de los Adelantados ha estado sujeta a los vaivenes del pacto entre CC y el PSOE ya que Díaz y el líder socialista en este municipio, Javier Abreu, han protagonizado permanentes desencuentros hasta que el alcalde despojó al socialista de sus competencias en el gobierno municipal.

La jugada socialista en La Laguna tiene una dificultad añadida y es que dos de sus cinco concejales en el ayuntamiento -el propio Javier Abreu y Yeray Rodríguez- están suspendidos de militancia por su partido y el grupo del PSOE en la Corporación, formado por cinco ediles, está dividido, por lo que la opción de que se presente una censura a CC supondría para los socialistas tener que reconducir la situación de los dos concejales expedientados y que los otros tres se sumaran.

Negociaciones

Con esta amenaza sobre la mesa, los socios de gobierno siguen apurando hasta última hora las opciones existentes para desactivar la moción de censura en Granadilla. La gravedad de la situación lo demuestra el hecho de que son el presidente Fernando Clavijo y la vicepresidenta, Patricia Hernández, lo que dirigen las conversaciones para buscar una fórmula que satisfaga a las dos formaciones. El límite son las 12.00 horas de hoy, es decir, el inicio del pleno convocado en el ayuntamiento del sur de Tenerife para debatir la censura presentada por CC, PP y Ciudadanos.

De esta forma, si hay acuerdo in extremis Jaime González Cejas seguirá al frente del Ayuntamiento de Granadilla y los dos partidos negociarán la entrada de los nacionalistas en el gobierno municipal y se explorará también esta opción en Arona, municipio donde gobiernan también los socialistas con acuerdos con un partido local y dejando fuera a Coalición. Si la censura prospera fuentes socialistas aseguran que se romperá la baraja y el pacto regional entrará en una espiral de difícil solución si La Laguna cae.

Las hostilidades entre los dos socios se han estado fraguando desde hace unos días, pero alcanzaron su punto de inflexión cuando el domingo se publicó un supuesto acuerdo entre CC y PSOE por el cual un concejal de cada partido presentaba su renuncia ayer por la mañana, los nacionalistas retiraban la moción de censura y se iniciaban las negociaciones para que Coalición entrase en el gobierno municipal de González Cejas. Incluso se recoge en ese acuerdo, aireado por los nacionalistas, que en el caso de la salida por renuncia del actual regidor CC daría su respaldo a un nuevo alcalde socialista.

La dirección regional del PSOE reaccionó de inmediato el mismo domingo negando que existiera ese acuerdo. El enfrentamiento entre los dos partidos se agudizó ayer tras comprobarse que durante la jornada matutina ni los dos concejales dimitieron ni el grupo nacionalista de Granadilla retiraba la moción de censura. Así las cosas, la dirección nacional de Coalición Canaria vira las tornas y culpa al PSOE de "imposibilitar" la retirada de la censura por no firmar ni el domingo ni ayer este acuerdo que, según CC, se pactó el viernes y la Ejecutiva nacionalista ratificó el sábado.

Los nacionalistas entienden que si su socio no firma ese acuerdo se siente liberados de expulsar a sus concejales en Granadilla y la censura sigue adelante, a la vez que se muestran sorprendido porque el PSOE niegue que la negociación para alcanzar ese acuerdo se haya producido. Los nacionalistas envían a los medios de comunicación el acuerdo y el acta de la Ejecutiva para demostrar sus afirmaciones.

La respuesta de la dirección regional socialista no se hizo esperar. El secretario de Organización, Julio Cruz, afirma que es "rotundamente falso" que haya negociado con CC un acuerdo como el publicado en los medios de comunicación: "No hay ni un solo correo, ni un escrito que informe a la dirección regional del PSOE de ese supuesto acuerdo", añade el dirigente socialista para asegurar que fue CC quien puso este documento sobre la mesa y la propuesta fue rechazada por los socialistas.

Cruz emplaza a Fernando Clavijo a cumplir con lo que firma y acusa a la dirección nacionalista de inventarse "excusas" y de no ser capaz de "mantener su palabra" tanto con su socio de gobierno como dentro de su propio partido.

Fuentes socialistas critican a CC por "filtrar" este acuerdo incluso antes de llevarlo a los órganos del partido como forma de presión, por lo que creen que se trata de una "maniobra maliciosa" de CC para forzar la renuncia del concejal socialista Nicolás Jorge. Según las fuentes consultadas, en el caso de que el PSOE aceptara ese acuerdo propuesto por Coalición la primera condición era retirar la moción de censura y sólo después se negociaría la entrada de los concejales nacionalistas en el gobierno municipal de Granadilla y se admitiría la renuncia del edil. El hecho de que los nacionalistas se adelantasen dando a conocer el acuerdo antes de tiempo y sin retirar la censura ha exasperado los ánimos en el PSOE, provocando un serio deterioro en las relaciones entre los dos partidos.

Pactos en cascada

El hecho de que CC haya virado las tornas acusando al PSOE de que al final haya censura en Granadilla tiene unas consecuencias directas en los pactos en cascada firmados por ambos partidos cuando se inició la legislatura, por los cuales ambos partidos se respaldan mutuamente allí donde sumen en ayuntamientos y cabildos. Pero las cosas no han salido como se habían previsto y los incumplimientos han estado a la orden del día en los últimos 15 meses. Hasta el momento los socios han ido sorteando como han podido las situaciones que se han ido produciendo en Santa Cruz de Tenerife, La Laguna, Puerto de la Cruz, Cabildo de Lanzarote, La Frontera, Arona o Arico.

La contundencia con la que han respondido los socialistas a CC con la censura de Granadilla añade una nueva complicación a la continuidad del pacto regional, cuyas dificultades han ido aumentando en los últimos meses y que habían llegado a su punto álgido con las críticas de los nacionalistas, encabezados por Fernando Clavijo, a la gestión de Sanidad, área estrella del PSOE en el Gobierno.

El punto sin retorno en el pacto se consumará hoy si las conversaciones entre ambas formaciones no logran frenar la censura que se debate en Granadilla. El escenario está preparado: ambos partidos se acusarán mutuamente, como ya están haciendo, de romper el pacto y se abre un escenario que puede tener consecuencias a todos los niveles.

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