La consejera de Hacienda, Rosa Dávila, insistió ayer en que el cierre anticipado de los presupuestos autonómicos no implicará recortes y consideró que hay cobertura jurídica suficiente para contar con fondos "para el tan ansiado" cierre del anillo insular en Tenerife y la carretera de La Aldea en Gran Canaria. Dávila subrayó que se ha procedido al cierre presupuestario anticipado por prudencia y responsabilidad y para garantizar la prestación de los servicios públicos esenciales.

Las declaraciones de Dávila se produjeron en su comparecencia celebrada ayer en el pleno del Parlamento regional para abordar el cierre anticipado de los presupuestos autonómicos y la reunión celebrada el 15 de septiembre entre el presidente canario, Fernando Clavijo, y el ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro.

A la citada reunión también asistió Rosa Dávila, quien aseguró que con este encuentro se certificó que hay una situación de incertidumbre con un Gobierno central en funciones y sin capacidad legislativa, lo que coloca a las comunidades autónomas en una posición de inseguridad jurídica inédita en el país. El ministro Montoro transmitió su voluntad política de transferir a las Islas partidas sobre las que hay abierta una incertidumbre pese a este compromiso, añadió Dávila, pues autorizar dichos recursos para las Islas requiere el acuerdo del Consejo de Ministros.

Dávila dijo que uno de los objetivos de la reunión era el de conocer el alcance del cierre anticipado en julio de las cuentas estatales y su posible repercusión en los fondos ya comprometidos, pues están pendientes de transferir a las arcas canarias 324 millones de euros, lo que representa más de la mitad de los 621 millones con los que inicialmente contaba el Gobierno autonómico.

La prórroga del presupuesto puede acarrear que decaigan las partidas nominadas por lo que se analiza cuáles pueden verse afectadas para tratar de salvaguardarlas, fundamentalmente en el convenio de infraestructuras. Por su parte, el portavoz de Nueva Canarias, Román Rodríguez, afirmó que de la entrevista con Montoro el Gobierno regional no trajo un regalo, sino un castigo y la malísima noticia de que vuelven los recortes a las Islas.