El secretario de Organización de CC, José Miguel Ruano, ha mostrado este jueves su convicción de que el pacto regional con el PSC está funcionando bien y no hay causa suficiente para su ruptura y ha planteado una revisión "profunda" de los acuerdos municipales entre nacionalistas y socialistas.

José Miguel Ruano, que aseguró que CC no tiene un "plan B", se pronunció de esta manera en declaraciones a los periodistas tras la decisión adoptada ayer por la Comisión Ejecutiva Regional del PSC de emplazar a una próxima reunión de su Comité Regional la continuidad del pacto autonómico suscrito con CC, tras considerar que los nacionalistas han procedido a su ruptura después de la moción de censura contra el gobierno local socialista en Granadilla de Abona.

Ruano mostró "un poco de desconcierto" en torno a la decisión real que adoptará el PSC pero valoró el hecho de que por el momento su socio de gobierno se haya dado un tiempo para pensar la situación, lo que es positivo.

Reiteró que CC no está en absoluto de acuerdo con la acción de sus concejales en Granadilla de Abona y por ello se ha iniciado un expediente y consideró que el pacto regional 2015-2019 suscrito con el PSC es "muy denso", trata sobre el crecimiento y el desarrollo económico y social de Canarias "y se está cumpliendo en todas las áreas".

A su juicio, todas las áreas del Ejecutivo regional, tanto las gestionadas por CC como por el PSC, están funcionando bien y en consecuencia los nacionalistas no alcanzan a ver "nada en este momento que deba producir la ruptura de este acuerdo que tan buenos resultados está dando para Canarias".

La estabilidad es un valor importante en momentos difíciles y complicados a nivel del Estado con la gobernabilidad de España y con la situación del PSOE estatal, agregó José Miguel Ruano, quien reiteró que la mejor decisión que puede adoptar el Comité Regional del PSC es la de continuar el pacto.

El secretario de Organización nacionalista admitió que sí considera necesario que haya una reunión con el PSC para dialogar "respecto a los asuntos que más daño nos han hecho en esa relación de confianza", pues los canarios no entenderían que el Archipiélago aporte más inestabilidad al ambiente de confusión estatal ni que el pacto autonómico sea perjudicado por una situación de base "estrictamente municipal".

En cuanto a las críticas a la actuación del presidente Fernando Clavijo y de la consejera de Hacienda, Rosa Dávila, efectuadas por el portavoz del grupo Socialista, Iñaki Lavandera, el dirigente nacionalista dijo que obviamente las rechaza, que entiende que se refiere a la posición orgánica que ambos gestores ocupan en CC y que no cree que un portavoz parlamentario deba manifestarse sobre esta cuestión, sino permanecer al margen.

Indicó Ruano que el secretario general de CC, José Miguel Barragán, está "muy disgustado" con la secuencia de hechos en Granadilla y "la escasa respuesta, por no decir pésima" que ha tenido por parte del secretario de Organización del PSC, Julio Cruz, de quien afirmó que más que un vehículo para el diálogo y la buena relación se ha convertido en un obstáculo.

Barragán creyó en la palabra de Julio Cruz pero ésta no vale, dijo José Miguel Ruano, quien no obstante se congratuló de que el PSC ha aseverado que no va a reaccionar "con revanchas" y espera "que nos sentemos" para abordar los graves problemas derivados del ámbito municipal.

"A nivel municipal las cosas han funcionado muy mal en algunos ayuntamientos pero en otros municipios y desde luego en los cabildos, como Lanzarote y La Palma, están funcionando bien, y por ello hay que poner sobre la mesa con nombres, cuáles son unos y cuáles otros e intentar trasladar la idea de que la estabilidad es buena para el desarrollo de las islas y valorar en qué sitios las cosas han ido bien y apartar dónde han ido mal", manifestó Ruano.

El dirigente nacionalista, quien defendió un mensaje de serenidad y estabilidad, insistió en su voluntad de reunirse con el PSC pese a pronunciamientos individuales de algunos cargos socialistas y en primer lugar, de Julio Cruz, que es "bastante responsable" de la situación generada para que haya sido posible la moción de censura en Granadilla.