La consejera de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias, Ornella Chacón, ha reconocido este martes que "lo único" que le da tristeza es ver una división interna en las instituciones del Archipiélago que perjudica a todos de cara a una nueva negociación del convenio de carreteras.

Tras asistir a una comisión en el Parlamento canario, Ornella Chacón ha asegurado que la forma de gestionar que practica es la del interés general y que ésa es "la línea recta" que va a seguir haciendo "caso omiso" a los comentarios.

La titular de Obras Públicas ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación después de que el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, se volviera a quejar este martes de "los graves incumplimientos" de la Consejería y advirtiera de no va a aportar recursos a fondo perdido para cubrir el desequilibrio inversor de la Comunidad Autónoma en un periodo de diez años en carreteras.

Preguntada por si se le ha agotado la paciencia con Carlos Alonso, ha respondido que los responsables públicos no deben dejarse influir por sus estados de ánimo.

"Suelo ser bastante persistente cuando considero que la forma de gestionar es la adecuada y no me rindo", ha agregado.

Ha reiterado que es "fundamental" que las administraciones públicas canarias estén unidas para reclamar al Estado la financiación que se merecen todos los canarios.

Por ello, ha pedido lealtad institucional con el fin de reclamar al Estado que cumpla con el convenio de carreteras.

Asimismo, ha abogado por darle "una vuelta al concepto de la movilidad en Canarias", ya que no se puede seguir pensando en más carreteras y coches porque el territorio se resiente y los turistas no viajan para ver carreteras sino paisajes.

En este sentido, ha anunciado que la Consejería estudia una posible ley de movilidad que refuerce el vehículo y el taxi compartido, propuestas, muchas de ellas, puestas encima de la mesa por el Cabildo de Tenerife.

La consejera ha indicado que uno de los grandes problemas que hay en el área de carreteras es la financiación, que proviene de un convenio de carreteras que se ha incumplido desde el año 2012, lo que ha restado al Gobierno capacidad ejecutora.

Este convenio con el Estado vence en 2017 y su presupuesto está destinado a terminar las obras pendientes, ha detallado la consejera, quien ha informado de que será el próximo convenio el que recoja las nuevas infraestructuras.

Ornella Chacón, que es "muy consciente" de los problemas que tiene la TF-1 como la TF-5, ha comentado que la Consejería baraja diferentes alternativas para solucionar estos problemas de movilidad.

Ha precisado que hay un equipo técnico que trabaja en finalizar los proyectos que no estaban aprobados y en evaluar las nuevas alternativas que ponen sobre la mesa los cabildos en general y en concreto el de Tenerife.

Respecto al carril bus-vao que se pretende construir en la autopista del norte de Tenerife, ha matizado que este proyecto no está aprobado y que lo que hay que hacer a partir de ahora es evaluar técnicamente qué requisitos hay.

Ha recordado que la Consejería se ha comprometido desde julio a que los ayuntamientos llegaran a un acuerdo previo con el Cabildo acerca de las grandes infraestructuras que acompañarán al carril al bus-vao.

Este carril requiere no solo unos enlaces complejos a desnivel sino también zonas de aparcamientos disuasorias bastante extensas, ha explicado la consejera, para la que es fundamental que los ayuntamientos tengan conformidad sobre dónde se van a ubicar estas infraestructuras, máxime cuando no están recogidas en los planeamientos insulares.

El Gobierno canario, ha continuado, está a la espera de que le den el detalle de los acuerdos que se han alcanzado con respecto las infraestructuras asociadas así como del resto de requisitos que los ayuntamientos pongan sobre la mesa.

Además hay que esperar por el informe de la Dirección General de Trafico ha sido solicitado, "hay que tener paciencia para esperar por estos procedimientos administrativos que no tienen calado político", ha apostillado.